Una fuga de gas natural en la red principal de distribución de Ronda, situada en la avenida de Málaga y a pocos metros del colegio de Educación Infantil y Primaria Miguel de Cervantes, provocó en la mañana de ayer una gran alarma en el vecindario y que muchos padres se llevasen a sus hijos de las clases, ante el temor de que se produjese una explosión.

El jefe de la Policía Local, José Carrasco, informó ayer de que durante la noche del pasado domingo se procedió a controlar el lugar y a avisar a los técnicos de la compañía suministradora tras comprobarse que en la zona había un fuerte olor a gas.

La divulgación de la noticia a través de los medios de comunicación locales provocó que a lo largo de la mañana de ayer numerosos padres acudieran al centro para retirar a sus hijos de las clases, por lo que más de un centenar de escolares abandonaron las aulas de un total de 680 alumnos que estudian en el colegio Miguel de Cervantes.

La directora del centro, María Jesús Becerra, precisó que la Policía Nacional le comunicó el suceso a primera hora y al mismo tiempo le expresó que la situación no era de peligro ya que al estar saliendo el gas a la calle no se había formado ninguna bolsa que hiciera pensar en una posible deflagración, por lo que no se suspendieron las clases.

Tanto los efectivos del Consorcio Comarcal de Bomberos, como los propios técnicos de la empresa, en un principio, con sus medidores, no encontraron la fuga, por lo que se barajó la idea de que el olor tuviera su origen en la concentración de aguas fecales de una arqueta de la avenida, que en algunos casos produce un aroma parecido.

Sin embargo, ayer por la tarde, un equipo especializado de la suministradora, procedente de Córdoba, localizó la fuga, que según matizó el mando policial era "pequeña" y no suponía ningún peligro, por lo que se iniciaron de inmediato los trabajos de reparación, sin necesidad interrumpir el servicio ni cortar el tráfico.

Aunque lo de ayer fue un susto, muchos rondeños recuerdan la explosión de gas en diciembre de 2007 en la que un chico salvó milagrosamente la vida a una joven, ya que el inmueble quedó destrozado con la explosión.