Las obras de la que será la primera residencia de ancianos pública del municipio de Marbella comenzaron ayer con el acto de colocación de la primera piedra a cargo de la alcaldesa, Ángeles Muñoz (PP), quien señaló que la actuación podría estar terminada el primer trimestre de 2011.

El geriátrico llevará el nombre de Mateo Álvarez Gómez, en honor de la familia que cedió el terreno en la década de los 90 sobre el que se levantará la instalación, y contará con un total de 166 plazas en régimen de residencia y 60 en régimen de centro de día, de las cuales el 70% estarán concertadas con la Junta de Andalucía.

Compromiso

Precisamente, la alcaldesa destacó "el compromiso del equipo de gobierno con los mayores del municipio y la mejora de su calidad de vida" y tuvo unas palabras de agradecimiento para la familia de Mateo Álvarez "por haber defendido por encima de todo que el suelo se destinara a una residencia de ancianos".

La regidora subrayó la importancia de que el municipio "cuente por primera vez con una residencia pública" y explicó que "se trata de un edificio emblemático que ofertará una asistencia de calidad y que da respuesta a la falta histórica de equipamientos en este ámbito".

Ángeles Muñoz aseguró que la calidad de sus instalaciones "lo convertirán en uno de los centros más completos de estas características en toda España" por lo que se ha mostrado convencida de que la iniciativa "será un éxito".

Sanyres

Por su parte, Antonio Prieto, subdirector de la empresa adjudicataria, Sanyres, agradeció la confianza depositada por el Ayuntamiento de Marbella para la construcción y explotación del centro y anunció que las obras de acondicionamiento de la parcela exterior comenzarán a ejecutarse "de manera inmediata".

En cuanto a las características de la futura residencia, el arquitecto Rafael Toscano explicó que la remodelación "respetará al máximo las características del inmueble" y concretó que el antiguo edificio del Trapiche albergará el área administrativa, la zona de usos múltiples e instalaciones para uso y disfrute de los mayores.

Toscano incidió en que la residencia "respetará escrupulosamente la normativa de seguridad" y, entre otras medidas, se diseñará para facilitar el desalojo vertical en caso de emergencia.