Llegó a la gestión municipal de su pueblo, Alameda, lleno de ilusión en 2007. No obstante, fueron muchos los obstáculos a saltar. Se encontró con un Ayuntamiento que asumía una deuda con bancos y proveedores de más de 1,2 millones de euros, además de la existencia de un importante y latente conflicto racial. En mitad de la crisis más duras que ha vivido Europa, Juan Lorenzo Pineda (IU) se muestra «satisfecho» de la gestión realizada, con unos presupuestos que duplican las cuentas que había cuando su equipo llegó al Ayuntamiento. Sin embargo, las dudas surgen ante la posibilidad de volver a presentarse como alcalde. Después del verano afirma que abrirá un periodo de reflexión con todos sus compañeros.

¿Cuál es el principal problema de los vecinos de Alameda?

Sin duda, el principal problema que tiene Alameda, al igual que multitud de localidades más, es la crisis. Actualmente las encuestas de población activa fijan en 400 el número de parados, pero con tarjeta de demanda de empleo hay más de 1.200 personas. Nosotros hemos tomado muchas medidas para solucionar esta situación. Creamos una bolsa de limpieza que emplea cada mes a unas ocho personas en la limpieza de edificios públicos. Tenemos una bolsa de albañilería en la que por concurso contratamos cada mes a otras siete personas. Además, las obras del polígono las vamos a hacer por administración lo que supondrá otro importante número de empleos. En definitiva, después del verano, a través del Ayuntamiento, habrá contratadas una 60 personas cada mes. Es un esfuerzo económico importante, pero la eficiencia que estamos haciendo en la gestión nos permite tener unos presupuestos que son el doble del que nos encontramos cuando llegamos, 6,9 millones, y además sin déficit.

¿Cuál es la situación económica actual del Ayuntamiento?

Cuando ganamos en 2007 teníamos una deuda con proveedores y bancos de 1,2 millones de euros. Quedan partidas pendientes, pero estamos en disposición de afirmar que para cuando acabe la legislatura no habrá proveedores del Ayuntamiento con facturas pendientes de más de tres meses. Eso es un logro en los tiempos de dificultades que corren.

En el ámbito urbanístico, ¿en qué situación se encuentra el pueblo?

Actualmente tenemos más suelo urbanizable de lo que permite el POTA, pero estamos en vías de solución de este asunto con una adaptación de las normas subsidiarias por parte de la Junta de Andalucía. Apostamos por esta solución urbanística en lugar de un PGOU porque de hacer un documento de planeamiento nos excederíamos en un 67% del suelo que podemos tener disponible, lo que me obligaría a pasar a rústico parcelas urbanizables con el consiguiente perjuico para los vecinos. En el terreno de la regularización urbanística, comentar que estamos en negociaciones con la Junta para alcanzar la vía jurídica posible que nos permita legalizar más de 250 viviendas irregulares levantadas en el pueblo. Las vías son posibles y válidas y las queremos impulsar en breve.

El tema de la inmigración fue noticia en su pueblo por conflictos raciales, ¿cuál es la situación actual?

Afortunadamente, a fecha de hoy, la inmigración en Alameda no es noticia en un sentido negativo. Cuando llegamos nos encontramos con un caos en este terreno. Gracias al trabajo conjunto de una plataforma integrada por todas las asociaciones vecinales y humanitarias de la localidad, con el apoyo de la Subdelegación del Gobierno y la Diputación, hemos normalizado las relaciones entre los vecinos de diferente procedencia. Esta especie de plataforma es la que se encarga de canalizar todas las ayudas que van destinadas a la población, y así todo es más igualitario. También pusimos en marcha una mesa de seguridad que dio sus frutos.

¿Se presentará de nuevo como candidato por su partido?

Tengo que abrir un periodo de reflexión después del verano junto a mi equipo. Lo que tengo claro es que de aspirar de nuevo a alcalde lo haría si me acompaña de nuevo el primer teniente de alcalde, Pepe García, porque por sus cualidades y valía yo ya no me vería como alcalde sino fuera con su apoyo. Ser regidor de tu pueblo es un privilegio, pero también un sacrificio, y más en periodo de crisis, por lo tanto tenemos que analizar los pros y los contras. De repetir lo haría sobre todo para concluir los proyectos iniciados y en los que hemos puesto mucha ilusión.

¿Fomenta el sector industrial cómo un nuevo pilar económico para su pueblo?

Así es. En septiembre se van a iniciar las obras de ampliación del polígono, y estamos en negociaciones con unos propietarios para que esta ampliación alcance los 150.000 metros cuadrados. Aunque ahora hay menos demanda de espacio, es una obligación moral para todos los Ayuntamiento poner a disposición de los emprendedores suelo industrial.