El Ayuntamiento de Antequera ha adquirido en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) ­–pendiente de entrar en vigor en las «próximas fechas»– una finca municipal de más de un millón de metros cuadrados ubicada a los pies de El Torcal, La Pesquera, en la que se proyecta un parque periurbano y de ocio relacionado con la naturaleza y la fauna que impera en el lugar, aclaró el alcalde de la ciudad, Ricardo Millán.

La parcela de terreno municipal se complementa con amplias zonas protegidas cercanas, con un importante referente en los pinares de Torre del Hacho, superficie protegida integrada en su mayor parte por pinos piñoneros de repoblación que tienen una antigüedad de más de cuarenta años. A esta zona natural se suma todo el espacio protegido contiguo a la finca de la Magdalena, junto al corredor verde natural que compone en sí el cauce de la ribera de La Villa.

Además, también hay que sumar a todo este cinturón verde la finca propiedad de la Junta de Andalucía La Alhajuela, sobre la que hay proyectada un centro de recuperación de especies amenazadas, actuación «ralentizada» de momento por la actual situación económica. «Los mencionados espacios configuran un cinturón verde público tremendamente importante que se protegerá y se desarrollará de forma amable con actuaciones que tengan que ver con el entorno, tales como centros de ocio y de descanso. En la propia Pesquera se plantea, incluso, definir un centro de formación relacionado con la equitación, que sea apto con la vegetación del lugar y la calidad del suelo», aclaró el regidor.

La nueva superficie de suelo rústico a proteger adquirida por el Consistorio se ubica pasado el cruce que conduce hacia Valle de Abdalajís, justo a los pies de la sierra kárstica de El Torcal. Justo enfrente se extiende el cauce de La Villa, superficie sobre la que se plantea un corredor verde de tipo peatonal en uno de los márgenes del cauce, a través de un plan de recuperación y reordenación del entorno a definir por planes parciales, tras la adquisición de las propiedades de antiguas manufacturas que aún bordean los lindes de la ribera.

La finca La Pesquera figuraba en el Plan General de 1987 como una zona residencial con 600 viviendas que contemplaba el desarrollo de un campo de golf. Cuando se revisó el documento en 1997 la propiedad «adquirió protección» por su cercanía a El Torcal, derivando los aprovechamientos urbanísticos que el propietario de esa zona poseía a otro espacio residencial de la ciudad, en este caso el Ensanche de la Verónica, parcela que contempla la ejecución de casi 2.000 nuevas viviendas. «Para poder proteger esta zona hubo que derivar los aprovechamientos urbanísticos que tenía el propietario a otro lugar. El Ensanche de la Verónica se define como la zona a urbanizar con capacidad para absorber más densidad de edificación. Inicialmente tenía capacidad para acoger unas 1.300 viviendas, a las que sumaron estas 600 viviendas que se proyectaban levantar junto a El Torcal», aclaró el primer edil antequerano.

En relación a la actuación proyectada en el Ensanche de la Verónica la junta de compensación creada en torno a este proyecto está pendiente de firmar el acto de replanteo de la urbanización de las parcelas con la empresa adjudicataria, lo que supondrá una inversión inicial de unos nueve millones de euros.