Casabermeja contará con su primer barrio de tipo ecológico en un entorno natural privilegiado ubicado cerca del camino del Chorro, en los terrenos conocidos como «la antigua era de Frasquito Ramos». La actuación residencial contará con muy baja densidad edificatoria, entre 60 y 70 viviendas, cuando en una parcela de estas características, de unos 72.000 metros cuadrados, se podrían ejecutar «mucho más inmuebles», aclaró el alcalde en funciones, Antonio Domínguez (IU), quien explicó que el plan parcial del proyecto ha sido remitido a la Junta de Andalucía para que las diferentes consejerías emitan sus informes sectoriales.

Recientemente, la Comisión Provincial de Urbanismo aprobó la modificación de elementos que permitió que el suelo en el que se proyecta la actuación pase de rústico a urbano. Se conseguía desbloquear así la promoción residencial después de un largo proceso administrativo. «Se ha tardado más de lo esperado, pero al menos la nueva corporación que se defina contará con las garantías de poder desarrollar la actuación, que será totalmente pionera tanto por los materiales empleados como por su desarrollo. En un futuro, de hecho, esperamos que la promoción esté bordeada por un parque periurbano», continuó Domínguez.

El proyecto residencial estará ejecutado de forma que respete al máximo el entorno y el medio ambiente. De esta forma, las viviendas se ejecutarán de forma que puedan aprovechar al máximo la luz solar, con elementos de ahorro energético.

A la baja densidad edificatoria de la futura promoción se unirán otro factores de tipo ambiental. Así, el espacio y la urbanización se completará con amplias zonas verdes y sendas peatonales, y se instalarán contenedores soterrados para evitar los malos olores y el deterioro del paisaje. La iluminación pública de la urbanización procederá de la energía que generarán instalaciones de tipo fotovoltaicas. A su vez, para el desarrollo de la actuación será necesario embovedar un arroyo. El alcalde en funciones lamentó que el proyecto haya tardado en desbloquearse a nivel urbanístico «unos tres años», concluyó.