Alrededor de 30.000 visitantes acudirán, entre el Jueves Santo y el Domingo de Resurrección, a las siete fiestas declaradas de Singularidad Turística Provincial por la Diputación que se celebran en Málaga, como es el caso de Álora, Cajiz (Vélez Málaga), Riogordo, Arriate, Cartajima, Istán y Benalmádena.

En ellas, se recrean diferentes episodios de la pasión y muerte de Jesucristo, que unen el atractivo cultural y tradicional a la celebración religiosa, manifestaciones que se remontan, en algunos casos, a varios siglos de antigüedad, según ha informado la institución provincial en un comunicado.

Este es el caso de El Paso de Riogordo, que data del siglo XVIII y que en su origen se representaba en el atrio de la iglesia con el fin de recaudar fondos para su reconstrucción. Actualmente se celebra en el recinto natural de El Calvario y él participan alrededor de 400 personas del pueblo que, en los meses que preceden a la Pascua, se afanan en ensayar los textos y preparar y confeccionar el vestuario.

Cada año asisten unas 15.000 personas, que se congregan en un escenario natural de 8.000 cuadrados. Esta recreación, que se celebra el Viernes y el Sábado Santos, está catalogada de Interés Turístico Nacional y de Andalucía por el Congreso de los Diputados y el Parlamento Andaluz, respectivamente.

En Álora tiene lugar 'La Despedía', también de Interés Turístico Nacional de Andalucía. Así, durante la mañana del Viernes Santo, entre 4.000 y 5.000 visitantes asisten al encuentro entre Jesús Nazareno y la Virgen de los Dolores, que tiene lugar en la plaza que del mismo nombre. Los portadores de cada trono se arrodillan al unísono varias veces.

La representación de Cajiz, en Vélez Málaga, es la más antigua de Andalucía y en ella se conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo en las jornadas del Viernes y Sábado Santos. El origen de los textos que se representan se remonta a los siglos XVI y XVII, cuando la recreación se realizaba en los atrios de la iglesia del pueblo y, posteriormente, en escenarios al aire libre.

En la actualidad se representan 36 escenas relativas al Antiguo y al Nuevo Testamento en escenarios construidos para la ocasión de manos de más de 250 actores, todos ellos aficionados y vecinos del pueblo. Está previsto que acudan unos 3.000 visitantes.

Fiesta de las Cortesías. Cartajima, por su parte, mantiene el encuentro entre la Virgen María y Jesucristo, la fiesta de las Cortesías, una tradición de siglos que se celebra en la madrugada del Domingo de Resurrección. Así, algunos vecinos recrean un huerto en las calles del municipio, mientras otros se desplazan cerca del río Genal para hacerse con un chopo que colocan en el escenario, donde queman a Judas durante la procesión.

A las 07.00 horas, Jesús sale de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario y es trasladado al huerto, donde queda depositado sobre un nicho. Allí permanece hasta las 12.00 horas, cuando, tras el repique de campanas, sale la Virgen del Rosario y se dirige a la calle donde está el cuerpo de su hijo, que es levantado para encontrarse con su madre. En ese momento, ambos se unen y realizan un pequeño baile, bajo la presencia de más de 1.000 personas que se dan cita cada año.

En Istán hay dos manifestaciones: las procesiones por las calles del pueblo y el Paso, cuyo origen se remonta al siglo XVII y que fue suspendido durante los años precedentes a la Guerra Civil; en 1980 fue recuperado. A ella asisten numerosos turistas y visitantes, alrededor de 3.000, que buscan una representación de la Semana Santa con identidad propia.

En la actualidad, la representación en la plaza del pueblo cuenta con escenificaciones en vivo de pasajes del Antiguo y Nuevo Testamento que culminan con la Crucifixión de Jesús el Viernes Santo y su Resurrección el sábado por la noche. Se trata de una tradición "muy respetada y popular" que cuenta con la colaboración de todo el pueblo. El número de personajes supera la centena cada año.

Sábado Santo en Arriate. Ubicado en la Serranía de Ronda, Arriate es el único municipio de la provincia que cuenta con una procesión el Sábado Santo, la del Santo Entierro de Cristo. Los jesuitas visten con la tradicional túnica morada y capirote blanco; mientras que los cristianos, el viernes y el sábado, llevan túnica y cinturón negro y capirote rojo.

Lo peculiar de la Semana de Pasión de esta localidad es que se divide en cristianos y jesuitas: los cristianos pertenecen a la Hermandad del Santísimo Cristo de la Sangre y Santo Entierro, y los jesuitas pertenecen a la Real, Muy Antigua y Venerable Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno.

La última manifestación religiosa que ha obtenido la catalogación de fiesta de Singularidad Turística de la Diputación Provincial de Málaga ha sido El Paso de Benalmádena, que atrae a unas 2.000 personas en las dos jornadas en las que se celebra.