Los ciudadanos del Valle del Guadalhorce tienen cada vez más perspectivas «sombrías» sobre el desarrollo de la comarca. Sobre todo tras la reunión mantenida con la consejera de Fomento de la Junta de Andalucía, Elena Cortés, que evitó dar una fecha sobre cuándo podrá abrir la nueva carretera de acceso a Coín, en el enlace de Casapalma, paralizada desde hace años.

La obra se encuentra bloqueada por problemas presupuestarios, está al 87 por ciento de su ejecución, rehusó dar un compromiso o una fecha para el reinicio de los trabajos o su puesta en funcionamiento.

Ante esta nueva decepción, los vecinos de la comarca y los empresarios, en particular, aseguran que viven una situación «extrema» no sólo en su día a día laboral por la necesidad de unas buenas comunicaciones para ejercer su trabajo sino también sino al temer por la vida de las personas que circulan por la actual vía que comunica Cártama con Coín.

El portavoz de la Plataforma por la Mejora de las Carreteras del Valle del Guadalhorce, Francisco Rueda, afirma que tras esta noticia «los ciudadanos tenemos cada vez más claro que se nos está dando de lado», y ante las palabras de la consejera -«se hará lo que se pueda»- señaló sentirse «avergonzado» al saber que Elena Cortés «no pasó por el nudo para llegar a Coín, y por tanto, desconoce la situación real del vial».

En este sentido, los empresarios de la comarca ponen el grito en el cielo. «Es una vergüenza», asegura Salvador Pavón, de Granja Salvi, una empresa que se ha posicionado como la segunda en producción de toda Málaga y la primera en comercialización. «Influencia muchísimo el estado de la carretera en nuestro trabajo diario y en la expansión de los negocios de Coín», indica Salvador, quien precisa que «nadie quiere aparecer por aquí», ya que , los trailers que le dispensan los cartones para los huevos, «no caben por la carretera».

Andrés Pacheco dirige Isoluz Audiovisual, que trabaja para toda España, y cuenta con 12 trabajadores. «Nos instalamos en Coín porque está a 20 minutos de Marbella, a 15 de Fuengirola y se suponía que a 20 de Málaga». Añade «trabajamos con clientes suizos, alemanes, ingleses y es vergonzoso traerlos por esta carretera», de hecho, en alguna ocasión, han perdido un trabajo por la «inseguridad» que les daba a los clientes este vial.

El estado de la carretera hace que sea la causa, según Andrés, de que «muchas empresas se hayan ido de Coín, otras que están pensando en irse y muchas que no llegan a instalarse». De hecho, según pudo conocer La Opinión de Málaga, una empresa de logística, que iba a crear unos 30 puestos de trabajo, desechó instalarse en Coín a causa de la «deficiente» carretera.

El gerente de la Asociación de Jóvenes Empresarios Profesionales de Coín, Andrés Campos, señala «la dificultad que supone para la labor de un empresario o de un emprendedor unas malas comunicaciones».

Del mismo modo, el gerente de Guadalpyme, Asociación de Empresarios del Guadalhorce, Pablo Cabrera, afirma que «no hay nada más determinante para el desarrollo del territorio que las comunicaciones», y «aún más en este momento, donde es necesaria la creación de empleo».

Y es que la construcción de este enlace fue adjudicada a principios de 2006 y contaba con un presupuesto de 13,2 millones.

El viaje de Cártama a Coín a 50 km/h

La Dirección General de Tráfico (DGT) ya cuenta con el anteproyecto de Real Decreto por el que se modifica el Reglamento General de Circulación. El borrador, que tiene fecha del 25 de febrero, plantea para automóviles y motocicletas una velocidad máxima en carreteras convencionales un límite de velocidad entre 70 km/h y 50 km/h para estas vías que tengan una plataforma inferior a 6,5 metros de anchura.

En estas carreteras convencionales estrechas que tengan una marca longitudinal de separación entre sentidos el límite será de 70 km/h y en las que no esté pintada esa marca, será de 50 km/h. A esta última pauta se ajusta, en prácticamente el total del vial, la carretera que va desde Cártama a Coín, ante la falta del nudo de enlace.

@rociocillana