La consejera de Fomento y Vivienda, Elena Cortés, anunció ayer en comisión parlamentaria que las obras de emergencia para reparar los daños provocados por las intensas lluvias caídas a principios de este año en las carreteras de la Serranía de Ronda A-405 y la A-369 han comenzado esta semana.

Cortés explicó que ambas actuaciones, que cuentan con un presupuesto de 520.067 euros y un plazo de ejecución de unos dos meses, permitirán corregir los deslizamientos de las laderas por las que discurre ambas vías y que afectan a las calzadas.

La carretera A-405, que une Gaucín con San Roque, registra en el kilómetro 0,8 un gran deslizamiento en la ladera por la que transita a su salida del municipio de Guacín, generando un hundimiento a lo largo de 40 metros. La calzada, de unos siete metros de anchura, se ha visto afectada casi en su totalidad, lo que ha obligado a habilitar un desvío en la margen derecha de la vía, apoyándose para ello sobre el terreno no afectado.

En la carretera A-369, que conecta entre Ronda y Gaucín, la obra de emergencia tiene un presupuesto de 338.804 euros para actuar en el punto kilométrico 23,1, a la altura de Benadalid, y en el 33,8, en la zona del Mirador del Cura.

En el primer punto, se va a construir una pantalla de 40 pilotes a pie de terraplén, que quedarán sujetos con una viga de hormigón armado. Esa estructura se reforzará con 15 anclajes de 60 toneladas en la viga. Una vez acometido este trabajo, se reconstruirá totalmente el firme en un tramo de unos 80 metros de carretera. En el segundo, se estudia desviar la carretera o la construcción de una pantalla de pilotes que contenga el terreno.