El exalcalde de Alhaurín el Grande, Juan Martín Serón, lo tiene claro. "Voy a volver". Con esta frase Serón arrancó el aplauso de las más de quinientas personas que se han concentrado esta noche en las puertas del Ayuntamiento para apoyar a un político que ni la condena del Tribunal Supremo por cohecho impide aseverar que volverá a ser alcalde de su municipio una vez cumpla el año de suspensión de cargo al que le condenó el alto tribunal. Martín Serón ha vuelto a arremeter contra la justicia ya que considera que "se trata de una acusación falsa que se han creído los jueces y que se ha montado sólo con indicios". El exalcalde insistió en que el fiscal Anticorrupción le tiene que pedir perdón y explicó ante sus seguidores que tiene la intención de recuperar la vara de mando pasado un año y no descartó ser candidato de nuevo a la alcaldía en las municipales de 2015 "siempre que el PP lo considere oportuno".

Serón, que estuvo acompañado por la nueva alcaldesa accidental, Toñi Ledesma, dejará la alcaldía mediante la firma de un decreto, lo que le permitiría mantener el acta de concejal durante el año de suspensión y asegurarse así la vuelta tras doce meses. Es la misma operación que realizará el también condenado concejal de Urbanismo, Gregorio Guerra, lo que significa que durante el próximo año el equipo de gobierno de Alhaurín el Grande tendrá dos ediles menos, ya que ambos se niegan a que corra la lista, lo que no obstante no afectará al funcionamiento del Ayuntamiento, ya que el PP tiene mayoría absoluta. Durante toda la tarde numerosos vecinos se han reunido para apoyar a Martín Serón e incluso lanzaron un folleto en el que se solicitaba el ingreso de dinero en una cuenta bancaria para pagar la sanción impuesta por el alto tribunal, que rechazó los recursos presentados por ambos contra el fallo dictado por la sección octava en enero de 2012, que los consideraba autores de un delito de cohecho y los obligaba también al pago de una multa de 200.000 euros. La sentencia consideró probado que exigieron 122.000 euros a un promotor a cambio de una licencia de obras para construir un edificio de 14 viviendas y garajes.

Horas antes, Toñi Ledesma recalcó que ha creído en todo momento en la "inocencia" de Martín Serón y de Guerra, de los que ha dicho que "son las personas más honestas y honradas que he visto en la vida y tengo plena confianza en los dos". La futura alcaldesa accidental incidió en que tendrá "todas la funciones del alcalde, pero legalmente el regidor sigue siendo él".