­La Guardia Civil investiga la muerte de una mujer, A. G. R, de 50 años, cuyo cadáver fue encontrado ayer en el aparcamiento del Club Tropical, en la avenida Málaga de Fuente de Piedra.

Una patrulla del instituto armado halló el cuerpo en el interior de un vehículo de color gris sobre las 15.30 horas, tras la llamada de las trabajadoras del establecimiento, a las que extrañó ver el vehículo por la mañana en el parking y comprobar que la fallecida se encontraba en el asiento del copiloto en una pose extraña.

Nada más llegar al escenario, los agentes llamaron a sus compañeros de la Policía Judicial de Antequera. Los investigadores de Homicidios y del Laboratorio de Criminalística del instituto armado se trasladaron hasta el lugar de los hechos para buscar testimonios y encontrar algún tipo de indicio que revelase las circunstancias de la muerte de la mujer, identificada como natural de El Burgo y vecina de Humilladero, donde regentaba un bar desde hacía dos años y medio.

Una vez concluido el trabajo de campo, el juez ordenó el levantamiento del cadáver y su traslado al Instituto de Medicina Legal, donde está previsto que hoy se le practique la autopsia. Las fuentes consultadas por La Opinión de Málaga aseguraron que el cadáver no presentaba signos de violencia y que los investigadores apuntan inicialmente a una muerte natural, aunque quedan a expensas de lo que digan los forenses.

Los vecinos de Humilladero, donde residía la fallecida, junto a su pareja, un camarero del Club Tropical, estaban consternados por el suceso, aunque muchos aseguraban sólo conocer de vista a la fallecida.

Manuel Fernández, dueño del bar que regenta la víctima, estaba en la noche de ayer impactado por lo sucedido. «Se trata de una mujer muy buena, y no ha faltado ni un mes en pagarme, tiene mucho carácter, pero a la vez mucho don de gentes», comentaba el propietario del bar.

El también vecino de Humilladero recuerda la noche antes de su fallecimiento, cuando estuvieron «tomando unas cervezas con unos amigos y todo estaba normal». Asegura que tampoco les extrañó que la mujer no abriera ayer el local: «pensé que habría ido a visitar a su familia a Málaga».

«El negocio le va regular desde hace unos 4 meses más o menos porque ahora vienen pocas personas, pero ella no se hundía, nunca estaba triste, siempre le ponía al mal tiempo buena cara», aseguró Manuel.

Una amiga cercana a la fallecida, Luisa Álvarez, no se explicaba ayer el fallecimiento de la mujer. «Es la persona más alegre que conozco», añadió, rechazando la posibilidad de que la víctima se hubiese quitado la vida.

La amiga de la mujer encontrada muerta ayer en Fuente de Piedra apuntó, con lágrimas en los ojos, que «tenía problemas de salud, tenia pólipos», pero «se los había quitado y estaba bien, estaba estupenda como ella era». Luisa recuerda la última vez que la vio, la noche antes de morir: «Estaba planchando cuando la vi porque ella es muy trabajadora, te ganaba con lo buena persona que era».