El pleno ordinario del Ayuntamiento de Antequera aprobó ayer por unanimidad solicitar a la Junta de Andalucía la instalación de una bomba de sustitución para el correcto funcionamiento de la piscina terapéutica del colegio Reina Sofía, cuyas obras han sido realizadas por la administración andaluza.

La infraestructura abrirá en el mes de enero tras seis años de lucha por parte de los padres de los alumnos de educación especial. El mantenimiento lo llevará el Consistorio antequerano, quien ha presentado la moción basándose en un informe de la empresa que gestiona la piscina municipal, que alerta de la necesidad de una segunda bomba.

La portavoz del PSOE en el pleno, Deborah León, indicó que «es cierto que ni los técnicos de la Junta ni los técnicos del Ayuntamiento apreciaron la necesidad de una segunda bomba, pero si hay posibilidad que se haga así lo apoyamos. No entendemos que sean cosas muy fundamentales, pero todo sea por la puesta en funcionamiento del vaso».

Por su parte, el portavoz de IU, Fran Matas, apuntó que «nos parece de justicia que después de tanto tiempo el vaso se ponga en marcha con toda seguridad. Se pide que haya una bomba de sustitución para el caso de que la otra bomba falle».