Sólo el 8% de los alumnos del colegio Reina Sofía de Antequera acudió ayer a clase

Sólo un 8% de alumnos del colegio Reina Sofía de Antequera (40 de los 460 escolares) acudió ayer al centro después de que el pasado jueves se anulasen las clases tras la mala combustión de una de las calderas.

Los padres de los alumnos lanzan un ultimátum a la Junta de Andalucía y exigen el cambio de la caldera. De hecho, hasta que no reciban un «compromiso claro» sus hijos no acudirán al centro.

Así, lo explicó ayer a La Opinión de Málaga la presidenta de la AMPA, Rosa Ontiveros, quien solicitó un «informe por escrito de algún técnico, para que nos aseguren que nuestros hijos están bien dentro del centro», a pesar de que el cuerpo de bomberos de Antequera anunció que no existe peligro alguno para los menores.

«Como tienen que hacer la segunda fase en el colegio, nos han estado dando largas. No queremos más promesas queremos hechos», recalcó Ontiveros, quien recordó que la solución es el cambio de la caldera, que tiene más de 30 años.

En este sentido, los padres de los alumnos del Reina Sofía proponen que la calefacción de las cuatro aulas con las que conecta la caldera que tuvo una mala combustión, sea sustituida por otra que se desechó porque sobrecalentaba la piscina terapéutica del centro.

Por su parte, los padres que decidieron llevar ayer a sus hijos al colegio no ven peligro alguno. Es el caso de Víctor Manuel Zorrilla, quien confió en la seguridad de sus hijas de 8 y 3 años. «No lo veía como algo grave, porque no hay problemas tóxicos y no tenemos miedo ninguno», explicó.

Del mismo modo, María, de 7 años y Javier, de 4, asistieron a clase como cada día. Su madre, Almudena Díaz, señaló la confianza en el dictamen de los bomberos. «Mis niños están en el edificio nuevo que tiene una caldera independiente, por lo que consideramos que no hay ningún problema».

Así, Díaz, al igual que otros padres que llevaron a sus hijos a clase, consideran que «se ha creado mucha alarma, pero respeto las opiniones del resto de padres», indica esta madre, que considera que hay que tener paciencia, confiando en que reparen la caldera lo antes posible.

Fuentes de la Delegación de Educación en Málaga confirmaron ayer que «no hay motivo para que los alumnos dejen de asistir al centro educativo». Aunque no ha dado plazo de sustitución, Educación confía en que el próximo lunes el centro esté normalizado, recalcando que «en ningún momento ninguna persona ha corrido el menor riesgo».