La alcaldesa de Ronda, Maripaz Fernández, anunció ayer que el equipo de gobierno presentará en el próximo pleno una propuesta para bajar el Impuesto de Bienes Inmuebles y la plusvalía que se aplica en caso de fallecimiento sobre los inmuebles heredados.

En el caso del IBI, la regidora quiere rebajar el tipo impositivo que aplica el Consistorio de un 0,825 a un 0,69, lo que conllevaría un ahorro de unos 40 euros por vivienda, según los cálculos de la regidora. La aplicación de este nuevo coeficiente supondría una disminución de los ingresos de las arcas municipales de unos 800.000 euros sobre los 8,5 millones que se ingresaron el pasado año, una cantidad que «podemos asumir», dijo.

La alcaldesa añadió que la bonificación aplicable al pago de la plusvalía en caso de fallecimiento, pasará del 60 al 80% y se mantendrán las ayudas a emprendedores menores de 35 años.