­La vaticinada inestabilidad política se ha instalado en la provincia y la falta de mayorías absolutas en muchas corporaciones locales, con la fragilidad de los pactos resultantes, está provocando una digestión difícil de asimilar. Las crisis de gobierno en los ayuntamientos de Mijas y de Alhaurín el Grande se erigen como el preludio de lo que puede ser una constante a corto y medio plazo. Con la renuncia a la alcaldía por parte de Martín Serón por un lado, y la crisis en Mijas a raíz del pacto de gobierno forzado entre el actual alcalde, Juan Carlos Maldonado, y su socio, el popular Ángel Nozal, por otro, se han abierto nuevos escenarios que sugieren aires de cambio. Esto ha provocado que en el PSOE de Málaga se hayan activado todos los protocolos para demostrar que la estabilidad política pasa por la capacidad de los socialistas para entenderse con el resto de grupos.

Con argumentos muy similares a los utilizados a nivel nacional, el secretario general del PSOE, Miguel Ángel Heredia, compareció ayer para hacer una valoración de la situación en estos municipios y dejó entrever la estrategia adoptada por su partido: la de establecer una dicotomía entre un PSOE con capacidad de diálogo y cintura suficiente para llegar a acuerdos, y un PP salpicado por irregularidades que le cierra el pestillo a una regeneración en Alhaurín el Grande y a un gobierno estable en Mijas. «El PSOE va a actuar con responsabilidad y diálogo. Lo hicimos tras las elecciones para que se pueda contar con la estabilidad exigida por la ciudadanía. El PP ni siquiera puede hacerlo con quienes pueden ser sus socios naturales», señaló Heredia en referencia a la crisis en el Ayuntamiento de Mijas que tiene enfrentada a Ciudadanos y PP.

En esta forma de hacerle oposición a los populares también encaja el papel que ha adoptado la portavoz socialista en Mijas, Fuensanta Lima, desde el momento en el que Maldonado lanzó el órdago de romper con Nozal. Habló de lealtad al equipo de gobierno y mostró su disposición «para sacar a Mijas de la inmovilización».

Discurso de mano tendida. Con este fenómeno de aparente normalidad para hablar tanto con la derecha como con la izquierda que quiere lucir ahora el PSOE, también se va a afrontar la negociación para buscarle un sucesor al defenestrado Martín Serón. Entienden los socialistas que un apoyo del PP a la actual teniente de alcalde, Antonia Ledesma, sólo serviría para que Serón siga mandando en la sombra.

«Todas las fuerzas estamos llamadas a entendernos», apuró Heredia, que también aprovechó para lanzarle un apoyo envenenado al presidente del PP en Málaga, Elías Bendodo. Aseguró, en este sentido, que sí el líder popular está en una encrucijada «aquí tiene la mano tendida del PSOE para regenerar ese ayuntamiento». Son conscientes en el PSOE de que un hipotético apoyo de Bendodo a Ledesma podría constituir el paso previo para rearmar al PP de nuevo en Alhaurín.

Por su parte, el propio Bendodo sigue guardando silencio. «El diálogo es el rey de los nuevos tiempos políticos y lo que todo lo reconduce», dijo limitándose a repetir el mismo mensaje que ya lanzó el pasado miércoles.