­Nuevo giro político en el Ayuntamiento de Ronda. Llevaba fraguándose desde principios de mes y se hizo rigurosamente oficial ayer. Con un comunicado firmado de manera conjunta, PSOE, Partido Andalucista (PA) e IU anunciaron que habían llegado a un acuerdo de gobierno que servirá, a su vez, como base para plantear una moción de censura contra la todavía alcaldesa del PP en, Mari Paz Fernández. El último escollo en esta nueva conquista del Ayuntamiento de Ronda está ahora en los respectivos órganos políticos de los tres partidos, que tendrán que respaldar el acuerdo la semana que viene como paso previo a que se registre la moción.

La simetría obedece ahora a los distintos procedimientos que establecen los partidos. Por más que presumiblemente salga adelante, la moción de censura queda pendiente de los acontecimientos de la semana que viene. En concreto, los socialistas someterán acuerdo de gobierno a su ejecutiva el próximo martes, al tiempo que se convocará una asamblea extraordinaria informativa para dar a conocer a sus militantes los términos de dicho acuerdo.

Por su parte, la portavoz del PA, Isabel Barriga, anunció ayer que el acuerdo de gobierno queda pendiente de su aprobación por parte de la coordinadora que gestiona en estos momentos al partido. Cabe recordar que Ronda es uno de los pocos municipios en los que el PA aún mantiene a concejales electos tras el desplome electoral en las últimas elecciones municipales, y que llevó a la formación a su disolución.

En todo caso, lo que queda de posible incertidumbre radica en la militancia de IU, que es la única llamada a ratificar el acuerdo a través del voto directo. Según confirmó ayer el portavoz de IU, Álvaro Carreño, se convocará una asamblea para la semana que viene. «En estos momentos, entre militantes y simpatizantes, tenemos censadas a aproximadamente 70 personas con derecho a voto», explicó ayer.

Sin especificar motivaciones concretas, el comunicado emitido sólo alude a que se habría «culminado un proceso de diálogo y consenso programático de las tres formaciones políticas por un futuro progresista para Ronda». El acuerdo de gobierno se basa en los programas electorales con los que se presentaron las tres formaciones a las elecciones municipales. En cuanto a los términos del acuerdo, las tres formaciones aseguraron que no darán a conocer sus detalles pormenorizados hasta que el acuerdo se apruebe por parte de sus correspondientes órganos políticos en el caso de PSOE y PA, y por las bases en el caso de IU.

Aunque el rumor de posibles movimientos para arrebatarle la alcaldía al PP con un tripartito se lleva sustentando desde que Fernández tomará posesión de su cargo como alcaldesa, el propio Carreño admitió que su partido había perdido la confianza en la capacidad de diálogo del PP para sacar adelante políticas de consenso desde su gobierno en minoría. En este sentido se apura a que Fernández tendría al Ayuntamiento de Ronda «paralizado» y que esto habría servido a IU para salir de la disyuntiva que había recorrido a la formación, mientras que el PSOE y el PA estaban a la espera para dar el paso definitivo.

Mientras tanto, Fernández no da todavía por perdida a la alcaldía y se agarra ahora a la militancia de IU como última vía de escape. «Ronda está funcionando con normalidad y estabilidad», dijo, además de mostrarse convencida de que la militancia de Izquierda Unida «será consciente de estas circunstancias y rechazará la moción».

De culminarse finalmente, sería la tercera moción de censura que provoca una cambio político en la provincia. La primera se materializó en Cuevas del Becerro y se llevó por delante al hasta entonces alcalde socialista, Joaquín Esquina. La segunda fue presentada en Pizarra, también, para desbancar al PSOE de la alcaldía.