­Javier Godoy, el niño de Campillos de apenas tres años que sufre Síndrome Nefrótico Congénito Finlandés, una enfermedad rara, podrá ir finalmente al colegio Manzano Jiménez de la localidad de la comarca de Antequera, como muy tarde el próximo miércoles. La Junta de Andalucía ha accedido a dotar al alumno de un monitor que cubra sus necesidades a tiempo completo, condición indispensable para que Javier pueda acudir a clase.

Y es que el menor necesita un cuidado integral, pues es preciso hidratarlo cada treinta minutos, toma un biberón de forma mecanizada, suele vomitar con facilidad, cuenta con dificultades en lo referido a su psicomotricidad y, al tomar un anticoagulante, cualquier golpe que reciba necesitaría de atención urgente.

Durante las dos o tres primeras semanas de escolarización, Javier llevará a cabo un proceso de adaptación en el que solo acudirá al colegio algunas horas hasta conocer su evolución. Será su propia madre, Carmen Navarro, la que asesorará al nuevo monitor para que éste pueda desarrollar su trabajo de la mejor forma posible junto al alumno.

La delegada de Educación de la Junta, Patricia Alba, mantuvo ayer una reunión con la familia del menor, en la que les expresó su «solidaridad y comprensión ante las difíciles circunstancias que están atravesando».

Así, Alba informó a la familia de que profesionales técnicos de la Delegación Territorial de Educación, siguiendo el protocolo establecido para estos casos, han valorado durante el mes de septiembre la situación del menor para actualizar sus necesidades y las variaciones que se hubieran podido producir desde la emisión del dictamen en el mes de marzo.

A la luz de los resultados de la nueva evaluación, la Delegación Territorial de Educación de Málaga, en el ámbito de sus competencias, va a atender sus necesidades educativas especiales reforzando los recursos existentes en el centro. En este sentido, la Administración regional recordó que ya había proporcionado con anterioridad a la llegada del alumno al centro el material adaptado necesario.

La madre de Javier no podía ocultar ayer su satisfacción y recalcó que «no habría parado hasta haberlo conseguido».