"Los firmantes, concejales y concejalas del Ayuntamiento de Alhaurín el Grande, representantes de los grupos políticos de PSOE, ASALH, IU y PP, se comprometen a desarrollar, a través de la figura legal de la moción de censura, un proyecto de regeneración política y social en nuestro municipio. Para este proyecto que engloba a la mayoría electoral reflejada en las urnas el pasado 2015 nos apoyamos en varias evidencias que queremos poner de manifiesto en este texto de moción de censura contra la alcaldesa, Antonia Ledesma Sánchez y su grupo político municipal, X-Alhaurín.

En el actual sistema electoral, regulado en la Ley Orgánica del Régimen General Electoral, la moción de censura queda perfectamente definida, indicando que el Alcalde puede ser destituido mediante moción de censura y que esta deberá ser propuesta, al menos, por la mayoría absoluta del número legal de miembros de la Corporación. Por lo que la propia ley deja claro que nuestro sistema, es un sistema de mayorías, contando los grupos firmantes con la mayoría necesaria para llevar a buen puerto dicha tarea.

No sólo contamos con la mayoría de concejales y concejalas, sino que contamos con la mayoría de votos, un 57,37%. La suma de votos de los cuatro partidos firmantes es de 5.191 personas que confiaron en nuestros proyectos políticos con el fin de que la situación en Alhaurín el Grande cambiase de rumbo. Hablamos de 1.322 votos más que el partido que hasta hoy ostentaba el gobierno.

Estamos convencidos de que cada una de las 5.191 personas deseaban un cambio real en nuestro municipio y una alternancia en el gobierno, y a nuestro juicio, lo más importante: un cambio en la forma de gestionar que el partido creado por Juan Martín Serón representa.

Aunque Martín Serón dimitió en febrero de 2016 forzado por un intento de moción de censura frustrado, X-Alhaurín y todos los miembros que lo integran, estaban y están de acuerdo con las prácticas que él y su concejal de urbanismo Gregorio Guerra Gil han venido realizando en nuestro municipio en los últimos años, prácticas que les llevaron a una condena con sentencia firme. Así lo han manifestado públicamente en distintas ocasiones a través de la portavoz de su grupo.

Esta moción de censura se presenta para que Alhaurín el Grande tenga un gobierno plural que alcanzará la regeneración política ante la corrupción y el fin de unas prácticas antidemocráticas mantenidas por el actual equipo, heredero de un proyecto político que fue sentenciado en los tribunales. La represión, la manipulación, el abuso de poder, las falsedades, los insultos y el desprecio mostrado hacia la esencia misma de la democracia han sido la hoja de ruta de los gobiernos de X-Alhaurín.

Muestra de esto último son los hechos del pasado año 2016. La presión ejercida sobre trabajadores y trabajadoras municipales por el simple hecho de solicitar lo que era suyo, por reivindicar sus derechos y su dignidad laboral.

La manipulación sistemática de los medios de comunicación públicos, que siguen siendo utilizados como herramienta de propaganda del actual equipo de gobierno, sin fomentar un verdadero debate público, abierto y plural, sobre los retos y oportunidades de nuestro pueblo, sin la menor crítica a quien gobierna.

Aún estando en minoría, en estos últimos plenos han despreciado a la oposición, trayendo por urgencia asuntos tan importantes como el acuerdo con los trabajadores o atrasando al máximo permitido por la buena fe, el acceso a expedientes para que no pudiésemos solucionar las dudas con los técnicos municipales de esta casa. Han seguido actuando como lo han hecho siempre, con el desprecio a lo diferente que su antecesor les enseñó, una actitud que aún estando, como estuvieron en mayoría absoluta, nunca debieron asumir, porque el respeto a los demás debe ser una norma, no una excepción.

Han tenido la oportunidad de desmarcarse, al menos, de este tipo de conductas, de mostrar más respeto hacia los trabajadores y trabajadoras de este ayuntamiento, hacia el resto de partidos políticos aquí representados, sin embargo, sus tibios intentos sólo eran pura fachada.

La forma que han tenido de aprobar los presupuestos les pone en evidencia. Falta de negociación, de diálogo y debate han marcado la elaboración del documento más relevante de cualquier administración. La muestra definitiva de la manera de entender la democracia ha sido aprovechar la ausencia de una persona para aprobarlos. Este es el talante democrático que demuestran.

No nos ha sorprendido, desgraciadamente, ya que ha sido un ejemplo más de cómo se niegan a aceptar la nueva situación política, igual que se han negado a llevar a cabo acuerdos adoptados por la mayoría absoluta de la corporación, como la comisión de investigación en materia de seguridad ciudadana, los cambios en los medios de comunicación públicos o los presupuestos participativos.

El acuerdo de moción de censura propone una regeneración política y social necesaria para Alhaurín el Grande. Este acuerdo que hemos alcanzado va más allá de las siglas y de los intereses propios de cada grupo, aparca las diferencias ideológicas y se forja con un sentido de la responsabilidad política que justamente falta al actual gobierno, y exige de confianza, de respeto, de diálogo y de entendimiento, todo aquello que unirá a nuestro pueblo, siempre convencidos de que lo que prioritario es recuperar la convivencia, en la pluralidad y en la diferencia, en Alhaurín el Grande.

El acuerdo se basa en unos pilares programáticos que todos consideramos indispensables para asegurar el desarrollo económico, hasta ahora lastrado por una visión excesivamente localista y desconectada; para avanzar en igualdad de oportunidades; para convertirnos en una referencia en transparencia y buen gobierno. Todo para demostrar que Alhaurín el Grande tiene todas las fortalezas para competir por el liderazgo de nuestra comarca, por reivindicar un peso específico en la provincia y por dar el salto definitivo para ser un pueblo con los servicios públicos de una ciudad. Nuestro pueblo como espacio de convivencia integradora.

Nos votaron porque dijimos que estábamos dispuestos a gobernar, porque dijimos que estábamos dispuestos a trabajar, a debatir y a mejorar nuestro pueblo. Nos votaron porque ofrecíamos un cambio, porque ofrecíamos dignidad y respeto, para las asociaciones y para los trabajadores y trabajadoras municipales, porque ofrecíamos igualdad y transparencia, para las personas y las empresas que quieren trabajar en y con nuestro ayuntamiento, y a esa tarea nos comprometemos.

Yo Teresa Sánchez Ramírez, como candidata a la Alcaldía de consenso entre todas las personas firmantes de esta moción de censura, acepto de forma expresa ser la alcaldesa del equipo de gobierno que se conforma a partir de ahora y con el que trabajaré para desarrollar un programa de gobierno fruto del diálogo, el debate, el respeto y la confrontación de ideas, un programa centrado en el desarrollo económico e industrial, en la mejora del medio ambiente, en el fomento de nuestras tradiciones, en el desarrollo urbano y en la protección social, con medidas encaminadas a los jóvenes, a facilitar el acceso a la vivienda y a los servicios públicos, y a devolver la dignidad laboral, la igualdad de oportunidades y la transparencia a nuestro ayuntamiento".