El Ayuntamiento de Alhaurín de la Torre está llevando a cabo una serie de actuaciones en el entorno del recinto ferial y del parque de El Algarrobal de la localidad, que, según el alcalde, Joaquín Villanova, son «las más importantes de este año», puesto que vendrán a garantizar la seguridad y el buen funcionamiento de las infraestructuras de desvío de aguas pluviales en la zona, con una inversión de 1,5 millones de euros.

Se trata de una de las obras incluidas en el plan municipal para hacer frente a las consecuencias de las fuertes lluvias del mes de diciembre, que además evitarán más daños en el futuro.

El proyecto que se está llevando a cabo implica la instalación bajo tierra de una estructura de marco rectangular de hormigón armado, en sustitución del anterior tubo metálico que conducía el agua de las precipitaciones procedente del arroyo Blanquillo.

Dicho tubo sufrió daños durante el temporal y se va a renovar toda la infraestructura, en un tramo de unos 400 metros lineales sobre el que se actuará en distintas fases, para arreglar los destrozos sufridos y aumentar la capacidad y resistencia de la red en esta área.

Para llegar hasta este tubo, explicó el alcalde, se han tenido que extraer 30.000 metros cúbicos de tierra. La nueva conducción, de hormigón armado, cuenta con 3,5 metros de ancho y 2,5 de alto y será mucho más resistente que la anterior, evitando hundimientos del terreno o roturas.

Este tubo es ya para toda la vida. Aunque esta obra no se vea, es muy importante, y nos preocupa lo que tenemos debajo de los pies. El hundimiento que provocó la rotura que ha afectado a un transformador de luz de baja tensión. Podría haber afectado a los vecinos del Cordobés y de la parte más céntrica del pueblo. En las próximas lluvias podremos ver el agua salir al arroyo que pasa por la avenida de Ceuta (Cuesta de René) evitando inundaciones por esa zona», manifestó el alcalde, Joaquín Villanova.