Los inmigrantes irregulares internados en la nueva cárcel de Archidona, aún sin inaugurar y que se ha adaptado de manera temporal como Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), se están quejando principalmente de la falta de mudas para cambiarse de ropa, así como del frío que hace en las instalaciones, según apuntaron desde la organización Málaga Acoge.

En este sentido, la abogada y presidenta de esta asociación, Arantxa Triguero, se entrevistó el pasado lunes con doce inmigrantes que se encuentran en el centro penitenciario, una conversación que se produjo a través de mamparas de cristal. Así, recalcó que entre las principales quejas de los internos se encuentran también el hecho de que no hayan recibido la visita de los familiares o no se les haya permitido coger su ropa en caso de disponer de ella.

«Uno de ellos iba con chanclas de la playa», apuntó la presidenta de Málaga Acoge, que considera que esta situación «atenta contra la dignidad» de estas personas. Asimismo, señaló que pasan todo el día en el patio, a excepción del tiempo para almorzar, y que en este periodo no se les permite ir a su celda a descansar, donde vuelven por la noche.

En cuanto a la falta de agua potable en el centro penitenciario, Triguero indicó que los inmigrantes comentaron que se les permite beber solo en horario de comidas y que, aunque les han devuelto sus teléfonos móviles, no les han dado los cargadores, por lo que no pueden hablar con sus familias.

La abogada criticó además las dificultades de acceso al centro penitenciario, donde después de esperar más de una hora para poder entrevistarse con los internos les dijeron que solo podían ver a uno de ellos porque a las siete de la tarde empezaba la cena. Finalmente, tras anunciar que iban a acudir al juzgado de guardia para presentar una denuncia y llamar al Defensor del Pueblo, pudieron entrar y entrevistarse con los doce inmigrantes previamente identificados.

Por su parte, la alcaldesa de Archidona, Mercedes Montero, compareció ayer en rueda de prensa, donde anunció que en los próximos días convocará una Junta Local de Seguridad extraordinaria, en la que participarán responsables municipales, miembros de las fuerzas de seguridad del Estado y representantes de la Subdelegación del Gobierno en Málaga.

Esta medida, según la regidora, se toma tras observar un «mayor movimiento de personas en el municipio, familiares y otros que dicen ser familiares de los inmigrantes internos en el centro penitenciario, así como concentraciones espontáneas a la entrada de la prisión, que obligan a la Guardia Civil a tener que desplazarse». Por ello, también pide un aumento de la seguridad en el núcleo urbano y en las zonas cercanas a la cárcel.

De otro lado, el grupo municipal socialista de Málaga manifestó ayer que otros 70 inmigrantes más han sido internados en la cárcel. El portavoz de la formación, Daniel Pérez, advirtió de que «es inadmisible la actuación que ha puesto en marcha el responsable de Interior, que está utilizando la prisión de la localidad de Archidona, que ni siquiera cuenta con licencia de primera ocupación, para internar a las personas inmigrantes que están llegando a las costas andaluzas».

En cuanto al personal de la cárcel, el presidente del sindicato de los funcionarios de prisiones Acaip, José Luis Pascual, advirtió ayer al Ministerio del Interior de que «no van a tolerar bajo ningún concepto» ser personal de Centros de Internamiento para Extranjeros, uso que actualmente tiene la cárcel de Archidona.