«La visita fue un circo». Así de contundente se mostró ayer el portavoz de la Plataforma de la Solidaridad con los Inmigrantes de Málaga, Gabriel Ruiz, que agrupa a una veintena de entidades sociales, en referencia a la visita de un grupo de diputados y senadores al nuevo centro penitenciario de Archidona, adaptado como Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), la cual tuvo lugar el pasado viernes.

Con esta acción, explicó el colectivo, se ha «intentado dar un lavado de cara a las instalaciones y las condiciones de los internos». En este sentido, el también técnico de intervención social de Médicos del Mundo aseguró que no dejaron acceder a las organizaciones sociales para poder corroborar el buen estado de los inmigrantes y del propio lugar porque «sabemos cómo es un Centro de Internamiento de Extranjeros, y no es lo que hay en Archidona».

El secretario de organización de la Agrupación de los Cuerpos de la Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip), Francisco José Macedo, apuntó que no les dejaron entrar a la cárcel porque «al igual que ellos -Plataforma de Solidaridad con los Inmigrantes de Málaga- saben lo que es un CIE, nosotros sabemos lo que es una cárcel».

De esta forma, indicó que «una prisión no es un almacén de personas. Hay que garantizar la asistencia médica, la limpieza, vigilancia y la asistencia social. Cuando fueron los parlamentarios harían lo mismo que hacen cuando van visitas a la prisión, enseñar los sitios bonitos: gimnasio, enfermería, jardines. Pero, si no hay equipo médico, medicamentos, y profesionales, esos lugares no sirven de nada».

«La realidad es que los propios policías han reconocido que se han tenido que desplazar hasta la farmacia más cercana para obtener la medicación que necesitaban los internos», manifestó Macedo, que añadió que dicha circunstancia «muestra la falta de equipamiento sanitario y de farmacia en el propio centro».

Además, señalaron que aún no tienen «constancia de que se haya subsanado el problema del agua corriente y los parlamentarios tampoco pudieron corroborarlo». Macedo explicó que antes de que saliesen los autos de los jueces que permitían el internamiento de los inmigrantes en Archidona, ya se había comenzado a recoger agua embotellada de la cárcel de Alhaurín para ser trasladada al Centro Penitenciario Málaga II.

Así, el representante de Acaip detalló que, desde la organización, han presentado dos querellas criminales. Una en Archidona por detención ilegal, «ya que una persona no puede entrar a la cárcel sin un mandamiento de prisión», y otra en el juzgado de Vera (Almería).

Por su parte, el diputado socialista Miguel Ángel Heredia tachó ayer de «indecentes» las declaraciones del ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, sobre los inmigrantes «recluidos» en el centro penitenciario, tras señalar este último que «han dormido todos los días con calefacción y han contado con agua corriente entre otras comodidades».