«Alguien tenía que haber mirado en la sala de espera; que no fue media hora, y eran las Urgencias». De esta forma se lamenta Bernardo Reina, cuñado del paciente que sufrió un ictus en el Hospital de Antequera mientras permaneció sin atención durante cinco horas, tras los hechos ocurridos el pasado día 11 de enero en el citado centro sanitario de la ciudad de los Dólmenes.

«Nos trataron mal, de forma grosera», añade Reina sobre el trato que recibieron al llegar al hospital para conocer el estado de salud de su familiar, asegurando además que les dijeron simplemente que «Ángel ya ha entrado», refiriéndose a su cuñado, tras lo cual se subieron en el coche y siguieron a la ambulancia que lo trasladó hasta el Hospital Carlos Haya de Málaga, donde fue intervenido.

De otro lado, Bernardo Reina indica que el enfermo no ha mejorado, un hecho que considera imposible. «Se nos va», lamenta en conversación con este periódico con la voz entrecortada.

El hospital aseguró el miércoles a través de un comunicado de prensa que «la atención recibida en cada momento se ha ajustado a la situación clínica que presentaba el paciente, tanto en el momento de su llegada, cuando se realiza el triaje por personal de enfermería, como tras su primera consulta médica, donde se le realizan diferentes pruebas, unas de resultados inmediatos y otras donde hay que esperar a su procesamiento».

Pese a ello, el cuñado del enfermo incide en que hay un paréntesis de cinco horas sobre el que no dicen nada. «¿Dónde estaban en ese momento?», se pregunta con un tono manifiesto de frustración.

La consejera de Salud de la Junta de Andalucía, Marina Álvarez, aseguró ayer que la Administración autonómica asumirá la «responsabilidad que corresponda», en caso de que la hubiere, respecto a la salud del paciente de 44 años.

En declaraciones a los periodistas durante una visita a los dos nuevos equipos de hemodinámica para procedimientos de cardiología intervencionista instalados en el Hospital Reina Sofía de Córdoba, Marina Álvarez lamentó lo ocurrido, como ya le han expresado también «los responsables del centro a la familia» del paciente, que ha presentado una denuncia contra el hospital y el Servicio Andaluz de Salud.

La consejera añadió que la dirección del Hospital Comarcal de Antequera ya ha entregado a la familia del paciente «toda la información clínica y todas las actuaciones que se llevaron a cabo» el día de los hechos, a la vez que la Comisión de Seguridad del centro sanitario «ha abierto una investigación para valorar si todas las actuaciones, tanto clínicas, como organizativas que se llevaron a cabo, son las adecuadas».

En cualquier caso, Marina Álvarez subrayó que la Administración sanitaria asumirá «la responsabilidad que corresponda, en caso de que la haya», si bien apuntó que «hay que dar tiempo a que se realice esta investigación» y, en función del resultado de la misma, «si hay que realizar algún cambio organizativo en el centro, por supuesto que se llevará a cabo», al margen de que, en el ámbito judicial, la Consejería de Salud va a «colaborar con la justicia».