Las lluvias que se están registrando en la comarca de Antequera durante las últimas semanas están favoreciendo de manera importante al conjunto de cultivos de la zona, que ya cuentan con reservas para afrontar los próximos meses. Sin embargo, para la localidad de Fuente de Piedra, las precipitaciones contabilizadas hasta el momento siguen sin ser suficientes para mejorar la situación en cuanto al abastecimiento de agua potable se refiere.
Desde finales del pasado mes de agosto de 2017, el municipio de la zona norte de la provincia de Málaga no cuenta con suministro apto para el consumo humano, aunque sí para realizar tareas domésticas. El único pozo con el que cuenta la localidad está manteniendo un nivel aceptable pese a su mala calidad, ya que presenta altos niveles de cloruros.
Eso sí, según confirmó el alcalde, Francisco Hidalgo, a La Opinión de Málaga, el pozo con el que se abastece el municipio ha aumentado su nivel en diez centímetros durante el último mes, algo que no ha sido suficiente para acabar con la problemática que arrastran los ciudadanos.
El regidor espera que «con el paso del tiempo» la situación siga mejorando y pueda prescindirse de los camiones cisterna que a día de hoy siguen suministrando agua potable a los vecinos del municipio.
Asimismo, técnicos del Ayuntamiento de Fuente de Piedra han estado recogiendo en los últimos días muestras de agua del pozo para proceder a su análisis y determinar si se ha producido algún tipo de cambio en la calidad del agua. Los resultados se conocerán en los próximos días y a raíz de estos, el Consistorio tomará las medidas que considere oportunas.
De momento, la Administración local, junto con el apoyo de la Diputación Provincial de Málaga, tendrá que seguir sumiendo el coste de más de 600 euros que cada semana tiene que abonar en concepto de cubas de agua potable.
De otro lado, el ente supramunicipal ha concedido a Fuente de Piedra una subvención por valor de unos 265.000 euros, que servirá para que el Ayuntamiento pueda reponer una de las tuberías que conecta el pozo que abastece al municipio hasta el casco urbano del mismo. Hidalgo ya explicó que se trata de «una tubería muy antigua», por lo que considera que «podría ser un acierto el cambiarla». Incluso, el alcalde no descarta que el problema pueda radicar en la citada infraestructura, que lleva años sin ser reemplazada.
El munícipe prevé que, una vez se publique la aprobación de la subvención en el Boletín Oficial de la Provincia, en unos cinco o seis meses se podrían iniciar las primeras actuaciones para la sustitución de la tubería. Todo ello tras la licitación de los trabajos de manera previa.
De igual forma, Hidalgo es uno de los principales defensores de que la solución a largo plazo sigue pasando por ejecutar el trasvase desde el pantano de Iznájar, en Córdoba, hasta la comarca de Antequera. Mientras tanto, el Ayuntamiento está manteniendo reuniones con responsables de la Delegación Provincial de Medio Ambiente y del Instituto Geológico y Minero de España, que serán quienes marquen otras medidas a desarrollar a corto plazo.
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