Un interno falleció este jueves noche en la cárcel de Archidona. Aunque las las causas de la muerte aún no están claras, fuentes de la investigación apuntan a que pudo haber sido por causa de una sobredosis. Con un patrón prácticamente idéntico al que se repite a menudo en las prisiones, el interno fue hallado sin vida, sin signos de violencia, por el funcionario del turno de mañana al practicar el recuento, siendo trasladado a enfermería donde, tras intentar los servicios médicos del centro su reanimación, finalmente fue confirmada su muerte.

La autoridad judicial de Archidona se ha hecho cargo de investigación de este fallecimiento y ha ordenado a la Guardia Civil que realice diligencias en el interior del centro penitenciario, "asumiendo éstos funciones desempeñadas de manera ordinaria en este tipo de situaciones por funcionarios de Instituciones Penitenciarias", denuncia el sindicato CCOO Málaga, que ven esta decisión del juez como un gesto de desconfianza hacia la profesionalidad de los funcionarios de prisiones.

Se trata de la segunda muerte registrada en este centro. La primera se produjo en diciembre pasado, cuando un ciudadano argelino de 36 años, internado cuando la prisión fue utilizada como centro de internamiento de inmigrantes. Fue hallado ahorcado en el interior de su celda. Aún no estaba abierta la cárcel Málaga II, que hasta abril no ha abierto sus puertas. Actualmente aloja a 378 internos. "Un elevado porcentaje de internos tiene graves problemas de adicciones, lo cual es un caldo de cultivo idóneo para que se produzcan, altercados, agresiones e incidentes regimentales", denuncia CCOO. Por todo, el sindicato solicita a la Secretaría General refuerzo del personal de esta prisión como la potenciación del tratamiento con este perfil de internos, demandando a su vez, la implementación de programas de salud que eviten muertes en los centros penitenciarios españoles.