Los distintos grupos de la oposición plenaria en el Ayuntamiento de Alhaurín el Grande y la edil no adscrita, María Fernández, firmantes de la moción de censura en enero de 2017 y a los que un juez les ha dado la razón para que se repita el debate plenario de entonces, exigieron ayer a la alcaldesa, Toñi Ledesma (PP), que convoque la sesión del pleno que haga cumplir con la decisión judicial.

Además, remarcaron en rueda de prensa que Ledesma «lleva desde enero del año pasado al frente de la Alcaldía de manera ilegítima». Durante la convocatoria conjunta celebrada ayer, la edil no adscrita expresó su satisfacción por la sentencia, «en especial porque el juez avala» lo que defendió en los días de la presentación de la moción, que ella no podía ser considerada como tránsfuga.

«Nunca formé parte del equipo de gobierno, no podía ser entonces una tránsfuga, y además fui suspendida cautelarmente y no expulsada. Tenía derecho a votar», matizó la propia Fernández, exintegrante del PP, justo antes de culpar al presidente provincial de su anterior formación política, Elías Bendodo, así como a la propia Ledesma, «de la inestabilidad política y aislamiento que sufre Alhaurín el Grande».

También tomó ayer la palabra el portavoz municipal del PSOE en este municipio y secretario general, Luis Miguel Molina, en presencia del candidato de esta formación en el municipio, Luis Guerrero. Declaró que el juez ha dado la razón a todos los argumentos expresados en enero del año pasado por los grupos de la oposición: «No se puede impedir votar. Estamos satisfechos con la sentencia. La alcaldesa no tiene más salida que acatarla y convocar el pleno».

El secretario general de Asalh y también edil en el Ayuntamiento de la localidad, Antony Bermúdez, catalogó de «cacicada, lo que se vivió en el pleno de la moción en enero de 2017. Si a la alcaldesa le queda algo de dignidad política debería convocar el pleno, lleva casi dos años ocupando un lugar sin legitimidad para ello», remarcó por su parte.

La candidata a la Alcaldía en la moción de censura y portavoz de Izquierda Unida en el Consistorio, Teresa Sánchez, sostuvo ayer que la actual regidora ostenta «de manera ilegítima» su cargo. «Esperamos que no sea un juez el que de nuevo obligue a cumplir una sentencia en el Ayuntamiento alhaurino, como ocurrió con la inhabilitación de Juan Martín Serón. La salida más digna de la actual alcaldesa y su equipo es convocar el pleno de la moción de censura, antes de que un juez establezca la fecha», matizó Sánchez.

La propia edil recordó que en enero de 2017 se había acordado ya «un proyecto político por la regeneración democrática de Alhaurín el Grande».

Fuentes del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alhaurín el Grande manifestaron que están pendientes de recibir la sentencia y se pronunciarán una vez que la estudien.