Los más de 125 trabajadores que en los municipios de Mijas y de Alhaurín el Grande integran la plantilla de la adjudicataria del servicio en ambos ayuntamientos, la empresa Urbaser, cerraron a última hora de ayer un acuerdo para mejorar sus condiciones laborales, en base a un nuevo convenio colectivo, y desbloquear así la huelga que durante los últimos siete días han protagonizado.

Un portavoz de los propios empleados de Urbaser reconocía desde primera hora de la tarde que se había logrado un acuerdo verbal. En definitiva, que Urbaser acababa de citar a la plantilla en una reunión donde indicaría que acataba las pretensiones exigidas desde un principio. «Un incremento salarial del IPC más el 3%; una nueva paga extra, repartir la jornada laboral de lunes a viernes; y una paga extra de 1.000 euros brutos al año era lo que solicitábamos», remarcaban fuentes del comité de empresa.

El acuerdo beneficiará a los trabajadores que desarrollan en Mijas el servicio de recogida de basura y de limpieza viaria, así como a los que en Alhaurín el Grande recogen la basura y que están acogidos históricamente al convenio de los compañeros que trabajan en el término mijeño. En esta última localidad no ejecuta la misma empresa la limpieza viaria, como ayer insistieron fuentes municipales.

Precisamente fue la regidora de Alhaurín el Grande, Toñi Ledesma (PP), la encargada de firmar poco después del mediodía el texto en el que se introducían las condiciones exigidas por los trabajadores y aceptadas de manera verbal desde la mañana por Urbaser. Así se empezaba a despejar el horizonte a la espera de la reunión vespertina en Mijas.

En este encuentro posterior se hizo hincapié en que la convocatoria de huelga no tendría un efecto inmediato, sino que quedaría de manera automática vinculada a la toma de posesión del nuevo alcalde en este municipio. Mijas es precisamente uno de los ayuntamientos en los que aún no se ha celebrado el preceptivo pleno de investidura. Este aspecto, que imposibilita asimismo la constitución de la nueva corporación en la Diputación de Málaga, está supeditado a la decisión de un tribunal en el sentido de determinar «si el escaño logrado por Vox pertenece al partido o a la persona que lideraba dicha candidatura» y que habría o no comunicado su renuncia justo antes de los comicios municipales del pasado 26 de mayo.

Será el nuevo dirigente local el que se tenga que comprometer a la firma de un documento que recoja las mejoras recién pactadas y se vincule al contrato en vigor con la propia Urbaser. En el caso de Alhaurín el Grande, el gobierno local agradeció ayer que los trabajadores hayan empezado a trabajar con normalidad desde el pasado viernes, en virtud del acuerdo que ayer se cerró verbalmente y que había empezado a resolverse antes del fin de semana, con dirigentes del PP como mediadores.