Rosa Garrido, la hermana de Lucía Garrido, pidió ayer justicia y consideró la vista en la Sala de lo Penal del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), con sede en Granada, como «nuestro último tren» para que se vuelva a juzgar a los cuatro acusados por el asesinato.

En declaraciones a los periodistas antes de la celebración de la vista, que resolvió sobre los recursos presentados contra la sentencia y a la que habían sido citados no solo los abogados sino también los acusados, Garrido pidió «que se anule el otro juicio porque nos pareció que no fue serio».

Garrido comentó que este es un juicio «demasiado complicado como para ser juzgado por un jurado popular» y valoró que en la causa no se enjuicia la muerte de una mujer, sino que «se debate una mafia policial, donde hay también dos asesinatos más en una finca». «Eso no debía haberlo hecho un jurado de a pie. Yo misma no me considero estar preparada para eso. Pedimos un jurado profesional, alguien que entienda del tema, porque para mi esto es un macrojuicio», aseguró.

La hermana de la mujer asesinada volvió a pedir justicia, que la ley sea arbitraria, y aseguró tener «mucha confianza, sobre todo en el fiscal», a la vez que volvió a recordar que «aquel juicio no fue serio».

Cuatro personas fueron acusadas por el asesinato de la mujer, en concreto su expareja y dos ex guardias civiles, como presuntos autores intelectuales; así como un cuarto hombre como supuesto autor material. Un jurado popular los declaró no culpables, al no dar fiabilidad a la declaración grabada del testigo protegido y por las dudas sobre el ADN hallado en una llave y la cadena de custodia.

El Tribunal popular entendió que la expareja no conocía a los otros acusados antes del asesinato, sino que se conocieron después. Asimismo, consideraron que no se desprende de ningún documento o testimonio la participación del que fuera compañero sentimental de la víctima.