Comienza el verano y, a pesar de la inusual situación de crisis sanitaria y económica producida por la pandemia del Covid-19, entre la población crece el deseo de salir y disfrutar del medio natural, desconectar, tomar aire puro y olvidar los problemas del día a día.

El Caminito del Rey ha sido, desde su remodelación hace cinco años por la Diputación de Málaga, uno de los destinos preferidos de los más de un millón y medio de turistas -llegados de todas partes del mundo- que han disfrutado de este enclave y que lo avalan como uno de los paisajes más espectaculares de la sierra malagueña. Un enclave que ha permanecido cerrado al público desde la declaración del estado de alarma el pasado 14 de marzo y que hoy, 12 de junio, vuelve a abrir sus puertas para el disfrute de los visitantes.

Muestra del deseo de la población de visitar el lugar son las más de 3.500 entradas vendidas en la primera semana que salieron a la venta. Para garantizar la salud y seguridad de estos próximos visitantes, la Diputación malagueña ha elaborado un plan -junto a la Cátedra de Seguridad, Emergencias y Catástrofes de la Universidad de Málaga- que establece las actuaciones preventivas e higiénicas que se deben seguir durante las visitas.

Para explicar estas nuevas medidas, el presidente de la Diputación, Francisco Salado, visitó en la mañana de ayer el Caminito, destacando que «esta reapertura supone un símbolo de la reactivación económica y turística de la provincia de Málaga y de Andalucía».

«Estamos preparados para recibir a quienes nos quieren visitar, para retomar la normalidad, para volver a disfrutar de los muchos atractivos que tiene la provincia de Málaga, la Costa del Sol. Y uno de ellos, sin duda, es el Caminito del Rey», destacó Salado.

El presidente añadió que se ha elaborado «un documento de más de 130 páginas sobre 'Investigación por riesgos de Covid-19 para la gestión de la seguridad del Caminito del Rey'», en el que han trabajado, durante dos meses, la Diputación, la mencionada Cátedra de la UMA y la empresa concesionaria de la gestión del Caminito, Hermanos Campano; además de contar con la colaboración de la empresa encargada de la inspección de las infraestructuras, Terra & Ferro, y de los alcaldes de la zona.

Entre las nuevas medidas de seguridad se encuentran la distancia de seguridad entre visitantes, la reducción del aforo, la instalación de cartelería y puntos de hidrogel y una mayor intensificación en las labores de limpieza. Todo ello para garantizar la seguridad de los miles de visitantes que esperan impacientes volver a recorrer las pasarelas y disfrutar de los paisajes que ofrece el lugar.