La Junta de Andalucía ha confirmado que este lunes la nueva unidad móvil de cribado de COVID-19 de la provincia de Málaga se estrenará en el municipio de Cuevas del Becerro tras la alta positividad registrada en el cribado realizado el pasado viernes, donde se detectaron 130 positivos de 182 test realizados, más del 71 por ciento.

Las pruebas, que comenzarán a las 09.00 horas, también se harán en el centro de salud de Cuevas del Becerro. Concretamente allí acudirán los menores de once años y los mayores de 75 años, a quienes se les cita por teléfono.

Al resto de la población se les está citando mediante SMS para acudir a la unidad móvil, salvo a los vecinos que han dado positivo por test de antígeno o PCR recientemente, a los que no se les hará la prueba. A las personas con discapacidad que no puedan acudir, se les hará la PCR en su propia casa.

A día de hoy el municipio, de 1.589 habitantes, tiene una tasa por cada 100.000 habitantes de 3.209,6. La alcaldesa de Cuevas del Becerro, Ana María García, ha indicado que serán pruebas obligatorias.

Así, en un mensaje a la población en el perfil del Ayuntamiento de Cuevas del Becerro, recogido por Europa Press, ha recordado la alta positividad del cribado realizado el viernes, con 130 positivos del total de 182 presentados (fueron convocadas 289 personas), lo que ha propiciado que la unidad móvil de la provincia inicie su trabajo en la localidad.

"No nos gusta que la estrenen aquí; una de las medidas es que nos van a hacer una PCR a todo el pueblo, a todos los que el pasado viernes no fueron convocados al cribado. No se hará a los que se hicieron el test el viernes ni a los que se la hayan hecho recientemente", ha indicado, añadiendo que en este caso, al contrario que hace dos días, sí será obligatorio. Según García, la ciudadanía está siendo convocada por SMS o teléfono "y no ir puede ser un delito contra la salud pública".

"Si toman estas medidas es porque es una medida de salud pública, aquí la pandemia no está controlada y han encontrado un número elevado de asintomáticos, 130 positivos que estaban haciendo vida normal y ahora están aislados y no van a seguir contagiando sin saberlo", ha expuesto la regidora.

Ha indicado que están en contacto con la Junta de Andalucía, con las autoridades competentes en materia de salud, y ha pedido "tranquilidad y paciencia" a la población. "Cuevas del Becerro tiene la situación que tiene y es prioridad. A nivel general la pandemia esta en una segunda oleada y tienen que ir respondiendo a otros problemas", ha apostillado.

Para evitar aglomeraciones, desde la Junta de Andalucía han pedido a los vecinos de la localidad malagueña que lleguen a la hora a las que son citados. En caso de duda, pueden hacer la consulta a través de Salud Responde.

El único policía de Cuevas, afectado

Ha aludido la alcaldesa a que la plantilla municipal también está afectada, destacando al único policía local del pueblo, por lo que se ha puesto a disposición a la Guardia Civil y también, por parte del Gobierno andaluz, a la Policía autonómica, "que van a estar muy vigilantes en las salidas y entradas al municipio" que, ha recordado García, deben estar "totalmente justificadas".

"Ahora pedimos esfuerzo y salir lo imprescindible, ir a un médico, a un banco y para de contar", ha manifestado. También, ha informado, se está en contacto con Protección Civil para que un equipo de voluntarios "eche una mano en todo lo que sea posible y agradecemos esa disposición".

Respecto al colegio, ha admitido que no tienen respuesta aún y están a la espera de la Junta de Andalucía. "Tenemos que ver qué pasa porque hay que pensar que las personas que dan negativo y tienen que seguir trabajando no tienen con quién dejar a los niños", ha afirmado.

Tras una reunión mantenida el pasado sábado con el resto de la Corporación municipal, un encuentro "bastante fructífero", la alcaldesa de esta localidad de la Serranía de Ronda ha hecho un llamamiento a la "responsabilidad, tranquilidad y paciencia".

"Estamos muy nerviosos y esto causa nerviosismo pero ante todo hay que mantener la calma. Ánimo a todos, no nos podemos hundir, hay que animar a la tropa y si todos lo hacemos bien, en 10 o 15 días mejoraremos los resultados", ha trasladado la alcaldesa, quien también ha agradecido la "empatía" y el apoyo de los ayuntamientos de alrededor de Cuevas del Becerro.

La Junta pide a los vecinos que eviten salir

Debido a esta situación, la delegada del Gobierno andaluz en Málaga, Patricia Navarro, ha coordinado a la Unidad de Policía Adscrita con la Guardia Civil a través de la Subdelegación del Gobierno central en la provincia, para que efectúen el control de acceso y garanticen el cumplimiento de las medidas dentro del municipio.

"Es fundamental que los vecinos eviten cualquier desplazamiento, si salen de sus casas que sea para lo imprescindible, y los que ya saben que son positivos deben seguir aislados el tiempo pertinente para evitar nuevos contagios, por eso apelo a la responsabilidad de todos, porque es la única forma de frenar al virus", ha insistido Navarro.

Además desde el Servicio provincial de Emergencias se ha organizado un dispositivo con la agrupación de voluntarios de Protección Civil de Ronda para asistir a la población que no pueda salir de sus casas, en cuestiones como el avituallamiento u otras necesidades esenciales.

La Agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Ronda han inspeccionado hoy mismo en Cuevas del Becerro la zona donde mañana se montará su Puesto de Mando que estará en la calle Real número 40 del municipio.

Habrá un dispositivo voluntarios de Protección Civil de mañana y otro de tarde de forma ininterrumpida. Tres coordinadores del Ayuntamiento se van a encargar de la recogida de pedidos a través de un teléfono único que se pondrá a disposición de los vecinos del pueblo para que puedan encargar sus compras, tanto de alimentación básica como de medicamentos.

Los voluntarios de Protección Civil recogerán los paquetes de comida de las tiendas y los medicamentos en la farmacia y los llevarán a las puertas de las casas. No se va a utilizar dinero en efectivo, porque tanto las tiendas como la farmacia tomarán nota de los pedidos y cobrarán los gastos a los clientes más delante, según el acuerdo alcanzado.