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Cáritas Antequera abre una casa de acogida para mujeres embarazadas

El inmueble, que dará alojamiento a cuatro chicas y sus bebés, es el segundo en toda Andalucía tras el que ya está abierto en Marbella

Voluntarias de la asociación Corazones Solidarios entregan material a Cáritas.

Voluntarias de la asociación Corazones Solidarios entregan material a Cáritas. / L. O.

Celia Paredes

Gracias a la caridad de una familia antequerana, que puso a disposición de Cáritas un inmueble en pleno centro de Antequera, ha nacido la casa de acogida Virgen de Espera, destinada a mujeres solas en estado de gestación y en situación de exclusión social que se enfrentan a la maternidad sin ningún tipo de apoyo familiar y carecen, por diferentes causas sociales, de posibilidades de alojamiento. «La única condición que nos pidió la familia para dejarnos el piso fue que destináramos su uso a algo relacionado con la figura de la mujer» cuenta María José Frías Perea, miembro de Cáritas Antequera, quien consideró oportuno abrir una casa en la ciudad después de observar que muchas derivaciones de la única casa de acogida en Andalucía, situada en Marbella, provenían de la comarca de Antequera. «Cuando hacemos un proyecto es porque hay una necesidad real», matiza.

La vivienda, que entrará en funcionamiento este mismo mes, cuenta con capacidad para acoger a cuatro mujeres y sus bebés.

Dispondrá además de un amplio equipo humano formado por una trabajadora social, un técnico y doce voluntarios que asumirán las tareas de acompañamiento y apoyo tanto en las necesidades de la vivienda como en otras actividades. Aunque el tipo de trabajadores podrá variar con el paso del tiempo en función de la demanda y perfil de cada mujer.

Durante la estancia, se ofrecerá los medios necesarios para afrontar los meses de embarazo, posparto y los primeros meses de vida de su hijo, aunque uno de los principales objetivos es potenciar la autonomía y la responsabilidad individual ante sí mismas, en su rol de madres y ante la sociedad.

«En todo ese tiempo ellas se comprometen a tener una formación, y a realizar talleres con el objetivo de conseguir independencia a la hora de estar y cuidar de su bebé», explican.

La colaboración y solidaridad de la ciudadanía ha sido desbordante pues «el piso se ha acondicionado entero únicamente con donaciones que han realizado los vecinos de Antequera», algo que sumado al esfuerzo y trabajo de todos lo que integran las Cáritas parroquiales ha hecho posible este proyecto. La asociación antequerana Corazones Solidarios ha colaborado también suministrando material, enseres y ropa, algo que a Cáritas le pilló por sorpresa.

La propuesta de entrada a la casa se realizará a través de Cáritas parroquial, centros de salud y hospitalarios, así como por parte de otras entidades que trabajen con personas en esa situación.