Infraestructuras

Coín invierte más de un millón de euros para lograr el vertido cero de aguas fecales

Se han instalado más de dos kilómetros de tuberías que llevan cada día más de 5.000 metros cúbicos de aguas negras para que sean tratadas en la depuradora del Bajo Guadalhorce, compartida con Álora y Pizarra

El alcalde de Coín, Francisco Santos, muestra la diferencia entre el agua que circulaba por el río en 2019 y ahora.

El alcalde de Coín, Francisco Santos, muestra la diferencia entre el agua que circulaba por el río en 2019 y ahora. / L.O.

L.O.

Coín ha alcanzado ya el vertido cero. Pero no ha sido cosa de un día, sino de años de planificación, trabajos e inversiones. El alcalde de Coín, Francisco Santos, ha presentado esta mañana el plan de actuación para la mejora y creación de nuevas infraestructuras hídricas que han permitido alcanzar el vertido cero de aguas residuales en la ciudad.

En total, más de un millón de euros invertidos en la red de saneamiento de aguas fecales para instalar un red de tuberías que se extiende en más de dos kilómetros con intervenciones de bastante profundidad y complejidad.

El vertido cero de aguas residuales es un "objetivo más cumplido" y un beneficio "para nuestro medio ambiente y para la ciudad en general", ha manifestado el alcalde de Coín, Francisco Santos, durante un acto celebrado en el Consistorio coineño, en el que se ha presentado un vídeo con las actuaciones llevadas a cabo y el beneficio que supone para la ciudad, al que han asistido el diputado de Medio Ambiente y presidente del Consorcio Provincial de Agua, Cristóbal Ortega, y por el concejal de Medio Ambiente, Antonio Lucena.

Las aguas residuales de Coín se depuran desde hace cerca de un año en la EDAR del Bajo Guadalhorce, depuradora compartida con Álora y Pizarra, que construyó la Junta de Andalucía y que gestiona de manera mancomunada la Diputación de Málaga a través del Consorcio Provincial de Aguas. "Desde la Diputación y el Consorcio tendimos la mano a los ayuntamientos para colaborar en la gestión y mantenimiento de este recinto que no es nada fácil y que resulta esencial para reducir ese impacto tan negativo para el río y el medio ambiente", ha explicado Cristóbal Ortega, quien también ha agradecido la gran apuesta que está haciendo el ayuntamiento coineño por el desarrollo sostenible del municipio siendo "un ejemplo para toda la provincia".

La gestión de la depuradora actualmente se sufraga en un 50% entre la Diputación de Málaga y los ayuntamientos afectados. "De esta manera contamos con una gran ayuda puesto que mantener estas instalaciones es muy costoso para las arcas municipales, pero se trata de un servicio básico que debíamos ofrecer", ha agregado el regidor, al tiempo que ha mencionado que Coín envía a la depuradora más de 5.000 metros cúbicos de aguas fecales al día para que sean depuradas.

Una decena de obras

Desde final del pasado 2020 las principales obras de intervención del Ayuntamiento para mejorar o instalar nuevas tuberías ya estaban realizadas. "Ha sido un arduo trabajo y una gran inversión que apenas es visible para el ciudadano, porque las tuberías están bajo tierra, pero que es fundamental para reducir nuestro impacto en la naturaleza y contribuir al buen desarrollo de nuestra ciudad", ha explicado.

Estas son actuaciones como el colector principal entre Carazony y la calle Antequera; entre el Ximénez de Guzmán y el cruce de Río Cuevas o en la linde del arroyo Mortaja, que unidas suman más de un kilómetro de tuberías. Esta lista se completa con otra de obras en las que ha sido necesario mejorar la red existente como es el caso del parque Periurbano con Clara Campoamor y con la barriada de las Flores, Félix Rodríguez de la Fuente o en la avenida Reina Sofía.

Una de estas obras, la de las Flores, ha sido financiada íntegramente por la Diputación, por lo que el alcalde ha querido agradecer la gran colaboración y "compromiso por parte de todas las instituciones". "Hemos eliminado no solo malos olores, roedores e insalubridad, sino que también hemos conseguido que Coín deje de mirar de espaldas al río, para que lo haga de cara", ha destacado el regidor, al tiempo en que ha incidido en el gran paraje natural que existe entorno a este río Bajo o río de la Villa.

"Poco a poco se está regenerando la fauna y flora del río, la naturaleza se va abriendo paso para el disfrute de toda la ciudadanía", ha resaltado, puesto que ya hay en marcha varios proyectos que van a suponer el aprovechamiento con zonas de esparcimiento para toda la ciudadanía por estos lugares.

Francisco Santos ha insistido en que este vertido cero era el paso primordial para que posteriormente pudieran llegar otros como el Parque Lineal, cuya obra sigue en marcha, o el Corredor Verde del Guadalhorce, que ya cuenta con proyecto redactado. "Era fundamental, primero, para el medio ambiente, y segundo, para el crecimiento y desarrollo sostenible de Coín, ya que ahora esta zona será todo un reclamo turístico y deportivo, que atraerá a visitantes, inversores y, por tanto, generación de empleo y riqueza", ha asegurado.

En cuanto a la calidad del agua, el concejal de Medio Ambiente ha explicado que el agua que discurre por los ríos de Coín y que llegan hasta el mar, según los últimos análisis efectuados en tres puntos diferentes antes y después de este proyecto, certifican que el agua tiene un valor DBO5 de entre 10 y 15, por debajo de los 25 puntos, el máximo permitido para que el agua no esté contaminada.

En julio de 2019 la prueba en los mismos tres puntos estaba entre 150 y 170. "Ya estamos notando desde el Ayuntamiento y por parte de los vecinos colindantes al río cómo se está regenerado la fauna y flora, por lo que esperamos que lleguen las lluvias tan esperadas y necesarias y terminen de concluir este gran proyecto", ha afirmado.

El alcalde ha mostrado al público la diferencia existente entre el agua que llegaba a los ríos hasta 2019 y el agua que discurre a día de hoy por el río.