Este domingo se cumplen diez años de la muerte de Valerio Lazarov, el hombre que sacó del ostracismo y los grises a la televisión española, el genio que cambió el modo de entretener al público y quien hizo el milagro de poner nombre a los responsables de los programas.

Lararov fue "el hombre que hizo del realizador una estrella", explica Vicente Torres, experto en televisión con más de 30 años de experiencia, veinte de ellos, como productor ejecutivo, realizador y director de realización de una de las productoras más importantes de España, Zeppelin TV, que coincidió con Lazarov en sus años de directivo de Telecinco.

"Hoy en día, los realizadores son considerados poco más que técnicos, su importancia creativa es mínima, además ya no existen grandes formatos de entretenimiento, todo se reduce a realities, concursos, tertulias y algún talent show, como 'La Voz' o 'Masterchef', y en ninguno de ellos la figura del realizador es capital", explica Torres.

"Pero cuando yo empecé, los realizadores -Ibáñez Serrador, Melgar, Pedro Amalio López, Gustavo Pérez Puig...- eran dioses, hoy no hay parangón con la época de Lazarov", añade.

Nacido el 20 de diciembre de 1935 en Birland (Rumanía), Lazarov llegó a España a través de un intercambio con la televisión rumana para realizar el programa 'Nada se destruye, todo se transforma' en 1968; TVE apenas llevaba un decenio funcionando y la tele era aún en blanco y negro.

Alumno de la Escuela de Cinematografía de Bucarest, llevaba once años trabajando en la cadena nacional rumana, donde hizo numerosos programas, sobre todo, musicales. A sus 32 años, se lo sabía todo de la tele.

Después de aquel programa, los directivos de TVE, que buscaban mejorar la imagen del país en el exterior, optaron por contratar al vanguardista realizador para que hiciera 'El irreal Madrid', el espacio con el TVE ganó en el Festival de Montecarlo en 1970. Era una atrevida sátira del fútbol, personificada en el intocable Real Madrid.

"Él trajo el color a la tele española, en sentido gráfico y en el figurado, y una manera distinta de hacer en la que el realizador era una figura esencial", comenta Torres.

"Convirtió al realizador en una estrella. Yo no trabajé con él pero sí con gente que lo conoció -recuerda Torres- y me contaban que los realizadores de la casa (TVE) iban a ver cómo trabajaba. Cómo usaba el zoom, cómo hacía los montajes tan picados. Se preguntaban quién era, cómo lo hacía. Era un autor, un artista que dejaba su huella".

A su nombre irá siempre unido su equipo de colaboradores: el ballet Zoom, el coreógrafo Dom Lurio, el montador José Luis Berlanga, el director de fotografía Jorge Herrero y, por supuesto, los artistas -musicales, sobre todo- con los que siempre contaba, de Peret a Lola Flores, Carmen Sevilla, Julio Iglesias o Marisol, inolvidable su paso por 'Especial Pop'.

En 1981 Lazarov se fue a Italia donde trabajó, primero en la RAI, para después fichar por Fininvest (antecesora de Mediaset), donde Silvio Berlusconi le incorporó a su equipo de directivos.

Esto fue decisivo en la llegada de las privadas a España y en la producción de la nueva televisión. En 1989 regresó con el encargo de poner en marcha Telecinco.

"Es cierto que empezó importando la programación de Tele Cinque, que sacó adelante con profesionales italianos, mientras formaba técnicos españoles", comenta Torres; así llegaron las 'Mamma Chicho' del programa 'Tutti Frutti', 'La media naranja', 'VIP noche' o 'La quinta marcha', el debut televisivo de Penélope Cruz.

"Luego tuvo la gran ocurrencia de hacerse con la primera serie de autor que llegó a España, que fue 'Twin Peaks'. Fue el primer 'pelotazo' de Telecinco. Entonces triplicaba la audiencia de su inmediato competidor. Si lo piensas -apunta Torres-, hoy, 25 años más tarde, Telecinco sigue manteniendo aquella línea. Imprimió su sello".

En 1994 dimitió de sus cargos en Telecinco, aunque continuó ligado a la cadena; al año siguiente montó junto con otros socios su propia productora, 'Prime Time Communication', detrás de programas históricos, como "Hostal Royal Manzanares", con Lina Morgan.

"Me gustaría ver a Lazarov ahora, cuando las posibilidades técnicas son tan brutales. Él empezó a usar el zoom cuando en TVE tenían torretas de objetivos fijos, que iban cambiando en las cámaras: con el zoom empieza a jugar, y a jugar con los colores, y a experimentar. Fue un artista que trajo aire fresco y una pequeña revolución a nivel de imagen en España", resume el experto.

Nacionalizado español desde 1972, 'Mister zoom', que llegó a recibir en 2004 la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo, murió en Madrid de muerte natural. Era el 11 de agosto de 2009. Tenía 73 años.