La incursión del flamenco en otros géneros musicales se ha convertido en una práctica bastante habitual, quizá por la necesidad de encontrar nuevas fronteras artísticas y vías para su desarrollo así como un diálogo que le proporcione un reconocimiento más universal. En este caso el cantaor onubense ha optado por buscar nuevos matices en su propuesta artística cantando y rindiendo homenaje a los iconos de la música flamenca desde sus orígenes hasta nuestros días a través de los grandes clásicos que ha dado el género.

Compositor y dinamizador del género además de cantaor de enjundia, sus muchos talentos no han pasado desapercibidos en su amplio recorrido nacional e internacional. Con varios premios de la Bienal de Flamenco de Sevilla (la más importante del mundo), entre muchos otros, y actuaciones en las Bienales de Flamenco de Roma y Países Bajos, en los festivales de Aix-en-Provence, Mont de Marsan y Les Sud en Arles; Carnegie Hall (Nueva York), Teatro Real y Auditorio Nacional de Música (Madrid) o la Fundación Gulbenkian (Lisboa). En 2017 fue galardonado con la Medalla de Andalucía. En 2018 recibió el Grammy Latino al Mejor Álbum Flamenco con el disco Al este del cante.