Exposición. Callejeando por Torremolinos

Según Azpeitia “para conocer un lugar, lo mejor es caminarlo”. Y eso es lo que él hizo por las calles de Torremolinos durante un verano, caminar y observar, vagabundear por sus calles y tomar nota de las imágenes que los nombres de las calles le sugerían.

Esta es una exposición que se hace en honor al Torremolinos que fue (con imágenes alegóricas de su pasado), al que es y al que será. Las obras expuestas no son u reflejo realista de sus calles, sino una visión expresionista y muy personal del artista, que con un acusado sentido del humor, pretende que el público las vea y las disfrute con ese mismo sentido. Su obra escapa de los academicismos para sentirse libre, pero es coherente en las composiciones y en el uso del color.

Azpeitia es un artista de trazos seguros, fuertes, densos, contundentes y cargados de intención. Sus obras transmiten movimientos y están dotadas de vida propia, no son estáticas. Antes era un pintor monocromático pero la luz del sur le ha transformado. De sus característicos blancos y grises ha pasado a incorporar brotes de color. También hay una evolución en la técnica ya que por primera vez experimenta con las herramientas digitales. “He descubierto tarde lo que es la creación digtal, pero me parece fantástica y quiero aprenderlo todo”, ha comentado el artista.