Las salas expositivas de la Colección del Museo Ruso dan la bienvenida a partir del 27 de mayo a una muestra que retrata la poliédrica e inagotable capacidad creativa de Pablo Picasso, nuestro genio más universal. A través de más de trescientas piezas realizadas por el artista malagueño entre 1905 y 1971, que proceden de los fondos del Museo Casa Natal Picasso, se trata de mostrar una antología de temas y técnicas, de estilos y experimentos, de testimonios de una vida basada en la creación y en el uso de la libertad llevada hasta sus límites. En este recorrido, comisariado por Mario Virgilio Montañez, el visitante será testigo del esplendor del artista malagueño desde su primera madurez hasta sus años finales a través de ejes temáticos que abarcan las diversas modalidades estéticas de su abrumadora producción: desde el tránsito entre la época azul y la rosa al cubismo analítico, el cubismo sintético, el clasicismo, el surrealismo y la libre figuración basada en la combinación de elementos cubistas y surrealistas.

En pocas ocasiones se ha tenido la oportunidad de disfrutar de esta selección de piezas (estampas, cerámicas, libros, fotografías y aguatintas) con un espíritu abarcador y global para mostrar un Picasso incesante, inabarcable e inagotable, un Picasso incesante en el que vida y libertad significaban lo mismo.