Inocencia es una mirada al mundo a través de los ojos de un niño. Es fantasía, es juego, risas a carcajadas, es inocencia….

La música nos transporta a lo cotidiano que se vuelve sorprendente cuando es el niño el protagonista. Por eso, la participación del público es esencial en este concierto, que combina partes instrumentales, con partes corales y de percusión corporal.

Este concierto fue un encargo de Museo Carmen Thyssen de Málaga y fue estrenado en el patio central en julio de 2020. Está dirigido a familias con niños de entre 0 y 6 años.