Tragicomedia que arranca con la búsqueda de los huesos de Miguel de Cervantes en el madrileño Convento de las Trinitarias Descalzas. Año 2015 de nuestra era. Los ruidos del golpeo de picos y palas despiertan a un Cervantes desubicado, en constante búsqueda de la gloria que no conoció en vida. Los avatares de un devenir penoso, sustentado por el fracaso, le han convertido en un hombre mohíno, envidioso, desconfiado y vanidoso pero, también, noble, sincero y humano, que pasa sin orden ni rumbo por las escenas de un Quijote que no sabe que ha escrito. Y así empieza la búsqueda de sí mismo, del mundo, sus coetáneos, dios, la cárcel, el amor, la guerra y su brazo (que no está tan muerto como parecía) queriendo mostrar que uno no se cae si no es empujado y demostrar que es un gran artista, el más grande de los autores, que el mundo se equivoca, que todos son peores que él, que todo lo que toca puede llegar a ser un éxito, que la vida siempre es otra cosa. Pero no... O quizás sí.

Euroscena es el resultado de más de cuarenta años de trabajo y constante renovación, durante los que su equipo humano ha estado siempre a la vanguardia de la producción teatral.