El huevo es uno de los productos primordiales de nuestra cocina, un ingrediente esencial de multitud de platos y recetas de repostería. Hay muchas razonas para comer huevos sin miedo y, en muchas ocasiones, son un comodín para solucionar comidas improvisadas. Sin embargo, por muy básicos que sean, manipular huevos no siempre es fácil.

Saber separar las claras de las yemas es fundamental en repostería y no a todo el mundo se le da bien. El método de toda la vida, el de ir pasando la yema de una mitad a otra de la cáscara hasta que solo quede la yema en una mitad y toda la clara en el bol, supone para muchos un auténtico tormento.

Por ello, para echarte una mano en esta complicada tarea, te presentamos 4 métodos para separar la clara y la yema de huevo, empezando por el más engorroso y acabando por el más sencillo.

Método succionador

¿Sabías que una botella de plástico vacía puede hacer milagros? Una vez hayas roto un huevo en un recipiente de bordes altos, coloca la botella boca abajo, de tal manera que la boca toque la yema, aprieta la botella y suéltala de golpe, verás como la yema es absorbida. Con cuidado libera el cuerpo naranja en otro recipiente y ya lo tienes, un huevo partido en dos.

Método separador

En las tiendas de utensilios para cocina, encontrarás el clásico separador de claras de toda la vida. Es parecido a un colador, pero en este caso tiene el fondo cerrado para sujetar la yema mientras la clara se escurre por los agujeros de los costados. Una manera muy sencilla de llevar a cabo esta técnica de cocina.

Método colador

Échale imaginación y, con un colador de malla gruesa, usa la técnica del método anterior. Da igual que el fondo no esté cerrado. Siempre que no tenga agujeros de 2 cm, cualquier colador de malla gruesa sirve para que las claras se escurran y ya yema se quede arriba.

Método de la pesca

En vez de estar pasando la yema de una mitad a otra de la cáscara, utiliza las manos para separar la yema de la clara. Aunque también puedes hacerlo con la ayuda de una cuchara sopera si quieres ser más limpio. Solo tienes que pescar la parte naranja del huevo. Eso sí, te recomendamos no colocar muchos huevos en el recipiente ya que, si no tienes cuidado, podrías llegar a quebrar una yema.