Se ha tenido que publicar una encuesta indicando que una gran mayoría de españoles cree que el Gobierno está siendo incapaz de afrontar la crisis, además de querer ocultarla, para que desde el Ejecutivo hayan decidido dar un paso a ver si lo remedian: Solbes comparecerá en el Parlamento para explicar qué está pasando y qué piensa hacer. Lo cierto es que a los ciudadanos nos irritan esos intentos grotescos del presidente Zapatero y sus ministros de no querer pronunciar la palabra ´crisis´ y dar vueltas dialécticas para negar que la situación que muchos españoles están padeciendo. Mientras, el presidente, en ese tono solemne que suele utilizar, dice que hay dos políticas económicas: una de derechas y otra de izquierdas. La suya es la de izquierdas, y eso es lo que vamos a notar. Es evidente que la división entre la derecha y la izquierda es nítida por más que algunos se empeñen en decir que todo es igual. No, no lo es, pero políticas económicas de izquierdas no son dar 400 euros a los contribuyentes. Como tampoco alcanzo a ver cuáles son las políticas de las que tanto ´cacarea´ Zapatero en pro de los jóvenes.

La política de este gobierno consiste en una especie de sombras chinescas, nada es lo que parece. Estamos padeciendo una crisis económica pero la realidad es que es una desaceleración. Los jóvenes que terminan la carrera emigran a otros países en busca de poder ejercer lo que han estudiado porque tienen más oportunidades y les pagan mejor. Pero eso sí, nuestro presidente hace guiños al electorado diciendo que él es el gran paladín de los jóvenes. Pero la pregunta es: ¿Qué hace por ellos? Es un escándalo que nuestros jóvenes médicos tengan que emigrar porque aquí no se les paga. Pero tranquilos, que Zapatero garantiza la paz social. Los grandes bancos están encantados con él, lo mismo que las grandes empresas que no pierden negocio, y los sindicatos están calladitos porque el presidente es uno de los suyos. Mientras, ya se sabe, no hablemos de crisis porque ésta no existe, y hablemos de la gran promoción que el Gobierno hace de los jóvenes mientras éstos emigran simplemente para poder cobrar un sueldo digno. Lo dicho, nada es lo que parece.