Opinión

Hay culpa, hay esperanza

La Franja de Gaza, además de un territorio acribillado, es una metáfora, un punto fuera del discurso que reúne multitud de símbolos, y habla sin usar argumentos. La metáfora explica el fracaso de Occidente. El fracaso de su modelo basado en la democracia liberal, pero que sólo funciona si es capaz de imponerlo a todos, incluso a quienes no lo quieren. El fracaso de su sistema de valores que a la hora de la verdad, para imponerlos, tiene que actuar usando medios que los niegan. El fracaso de su sistema militar perfecto y poderoso, pero que deja de funcionar cuando no se le teme y se asume la muerte. El fracaso de una razón que al final sólo prevalece a través de la fuerza. Es nuestro fracaso, nadie se engañe: Israel somos todos, es la vanguardia de Occidente, su puesto avanzado en el desierto. Lo único que nos libra del fracaso absoluto es la conciencia del fracaso, la mala conciencia.

Tracking Pixel Contents