Cartas al director

Como actual fiscal en funciones de la hermandad de la Sentencia y candidato a hermano mayor en las próximas elecciones del día 20 de julio, es mi deseo que la «Málaga cofrade» conozca una serie de sucesos acaecidos últimamente en nuestra querida hermandad y de los que se han hecho eco diferentes medios de comunicación

En un principio, me veo en la obligación de catalogar como nefasta la labor ejercida por el dimitido hermano mayor, Eduardo Pastor Santos, en estos tres años, en los que nos aseguró intentaría «apaciguar» una cofradía expuesta desde hace años a tensiones y divisiones. Sectarismo, endogamia en todos los aspectos, y conculcación continua de los estatutos que nos rigen, este es el panorama que nos ha ofrecido el «pacificador» que encabezó una candidatura única en el año 2007. Como colofón a todas estas arbitrariedades, el mes pasado comunicó su dimisión para, acto seguido, presentarse nuevamente en un flagrante fraude de ley. Sus fieles miembros de la permanente actual son los otros candidatos y el fiscal que les habla ha sido sustituido.

Evidentemente, y a pesar de las continuas presiones y soterradas coacciones, en ningún momento dejé de denunciar ante los hermanos, la junta de gobierno y el Obispado de Málaga estas situaciones anómalas. Esa es la razón del adelanto electoral: hacer callar a una parte importante de hermanos, eliminar a un molesto cargo y poder vencer con inicua ventaja en los próximos comicios.

Asimismo, debería de conocer la opinión pública malagueña, y más en concreto la cofrade, que se encuentran impugnados tanto el Cabildo de Cuentas del pasado día 22 (donde hubo 10 votos caídos del cielo sin estar presentes), como la candidatura de la persona que nos ha abocado a esta situación y que pretende, por lo que parece, seguir apagando los «incendios con gasolina». Esté seguro de que no lo permitiremos y por ello me presento a las elecciones. Enrique Moragues Alcaraz. Fiscal en funciones hdad. de la Sentencia y candidato a hermano mayor. Málaga