Nos han ordeñado tanto€ Si no fuera por el sufrimiento de quienes se han despeñado, empujados por la especulación que aplaudieron gobiernos sucesivos y por la avaricia sin freno ético que eso generó, uno desearía que la crisis no terminara. Para que no nos sigan ordeñando como a cabras.

Pero también en la crisis más ganan quienes ya ganaron mucho en la bonanza. Y pierden quienes en la bonanza no dejaron de ser mileuristas ni ganaron algo que hoy no esté hipotecado o esperando el embargo. Las ahora combatidas cláusulas suelo son el ejemplo. Abusar de aquel de quien ya se abusaba al cerrar la compraventa, por un bien sobrevalorado y por el que ya tendría que pagar un seguro y otros servicios cada vez más caros: luz, agua, gas, y de ahí a la televisión por cable, hipnotizados por el fútbol de pago, embarcados en celebraciones desaforadas de cumpleaños y comuniones que parecían bodas, y adictos a centros comerciales que no se acababan nunca de inaugurar.

Fuimos, somos, ganado. Hace tiempo que el cliente ya no tiene la razón ni el ciudadano lo es antes ni después de la campaña electoral. Había que uncirnos a la ruleta de la fortuna mientras los mercados se jugaban a la ruleta rusa nuestra pobreza futura. Y todo ello mientras se nos ofrecía un espejismo de desarrollo sin vuelta atrás y mil anuncios al día a través de una gigante pantalla de plasma abotargada de Sálvame de luxe.

Ahora los datos del Banco de España, -aparte de los impresentables triunfalismos de Montoro y Botín, y del derrotismo extremo respondido por Rubalcaba: «lo peor está por llegar»- parecen confirmar que terminó la recesión económica. Ese 0,1% de crecimiento entre julio y septiembre, apenas nada a lo que agarrarse pero mucho para sacar pecho político, parece suficiente para que los economistas admitan que se ha tocado suelo en aquello que Zapatero no quiso llamar crisis hasta que la crisis le llamó a él, y entonces fue demasiado tarde, electoralmente hablando (no sé si de esto hablará en el libro por el que tan poco interés despertó en su entrevista con Ana Pastor, qué oportunidad perdida€). Aquí abajo, Analistas Económicos de Andalucía ha concluido que el año que viene se crecerá alrededor de un 1% (Málaga sería el motor de ese crecimiento), lo que podría conllevar algún empleo, a pesar de que siempre se ha dicho que en España no se crea empleo hasta que el crecimiento supera el 2% del PIB. Claro que los nuevos empleos están tan baratos€

Ayer había colas para ir al cine. Las entradas costaban 2,90 euros. Exhibidores y espectadores han salido ganando. De eso se trata, de dejar de ordeñarnos como a cabras, hasta dejarnos secos y con mala leche. Todos debemos poder ir al cine. Y, sobre todo, debemos tener un buen abogado y un buen médico. E ir a un buen colegio, a un buen instituto o a una buena universidad. Si no, que se metan el cacareado e incipiente crecimiento por donde tanto les cabe. Pero que tengan cuidado, que la cabra tira al monte€