El PP y el PSOE deben tomar nota. Cualquier lectura positiva y partidista de los resultados por parte de ambas formaciones significaría que ninguna de las dos fuerzas ha entendido el mensaje de los ciudadanos. Ayer no se votó en las urnas qué Europa queremos, si no que se alzó la voz por el desafecto que sufren los ciudadanos por la severa y larga crisis y la proliferación de casos de corrupción que salpican a cargos públicos de los dos partidos en casi todos los rincones de España. Se votó lo que más temen los partidos mayoritarios: un castigo rotundo al bipartidismo aunque bien es cierto que el sistema de circunscripción única permite a los partidos minoritarios mejorar sus resultados.

El bipartidismo sale muy tocado en España y la suma de pérdida de votos entre ambos partidos asciende a más de cinco millones. En escaños, los dos grandes partidos han pasado de obtener 47 escaños, en 2009 a los 30 logrados ayer, con un apoyo ciudadano que no alcanza ni al 27% cuando siempre se han movido en las horquillas del 35-45% de apoyo.

La otra lectura de estas elecciones es que empieza la batalla por el control del PSOE. Elena Valenciano reconoció que los resultados son malos (el peor en la historia del partido) y hoy se iniciarán los movimientos que desembocarán en las primarias del mes de noviembre para elegir al candidato para las elecciones generales de 2015 que será el teórico líder del PSOE. Rubalcaba ya es pasado, pues su derrota ante un PP desgastado y debilitado por la crisis y los recortes hace poco verosímil que tenga capacidad de reiventarse por enésima vez. Huele a congreso extraordinario pues este batacazo deja en el aire su inmediata continuidad como secretario general del PSOE.

Andalucía. El PSOE andaluz de Susana Díaz remonta. Tras encadenar tres derrotas en los últimos procesos electorales, los socialistas ganaron las elecciones europeas en Andalucía con el 35,17% de los votos, lo que le sitúa con más de nueve puntos de ventaja sobre el PP, que alcanzó el 25,85%. Pese a la victoria, el varapalo para ambas formaciones es mayúsculo por la fuga masiva de votos. El líder del PP-A, Juan Manuel Moreno Bonilla, apechuga también con una contundente derrota, que unido a su escaso con0cimiento en Andalucía puede que gane enteros la posibilidad de que Díaz adelante las autonómicas a este otoño. El PP, pese a su fortaleza del poder municipal, está en pañales.

Málaga. El PSOE gana en la provincia y por primera vez en una década le moja la oreja al PP en Málaga capital. Ojo. Ayer la sede del PP era casi un funeral, parecido al de las autonómicas del 2012. No hubo valoración. El silencio es quizás el mejor titular. Algo deben hacer mal para cosechar esta derrota.