"No les toca a ellos decidir, sólo tú puedes decidir qué hacer con el tiempo que se te ha dado". Ni Churchill ni Lincoln la cita es de Gandalf. El gran mago blanco se la dice a Frodo cuando éste se da cuenta de que tenía un gran poder, el anillo único, y no sabía qué hacer con él. Frodo se lamentaba y Gandalf le dijo que no era tiempo de titubeos.

Tenemos a Ciudadanos, un partido con poder en el Ayuntamiento y no debe ocurrirle lo mismo. Deben decidir, ellos y no otros, qué quieren ser, si gobierno u oposición. Si quieren gobernar, adelante que cojan un área con presupuesto y demuestren que pueden. Si quieren ser oposición, sensacional, que se conviertan en una oposición sin hipotecas y que sean libres para tratar cualquier reforma de la ciudad sin tener impedimentos que les coarten de tal viaje.

La batalla ha empezado y el alcalde, otro gran mago, ha descubierto sus cartas, ha enfilado sus posiciones contra el partido que le acoge, quizá para desviar atenciones o quizá para dejar claro quién tiene a la ciudad bajo control. Mientras tanto Elías Bendodo se vende en Madrid, más allá de la Tierra Media, como el gran hacedor, con paso firme y con su anillo de poder de única gran provincia con control de Diputación y Ayuntamiento. Cassá debe guardar el anillo único de poder que tiene, si no, quedará diluido en una batalla entre dos reyes que también tienen sendos anillos de poder.

En el camino a Mordor, Frodo sabe que los compañeros de viaje son muy importantes, de igual forma Juan Cassá debe acompañar su poder de un buen grupo de aliados que permita que Ciudadanos refuerce su posición en Málaga, no sólo con vistas a las generales, sino también con el propósito de mantener una legislatura defendiendo lo que los más de veinte mil votantes pensaron cuando eligieron las siglas naranjas.