Vaya susto

Leyendo antigüedades de puro aburrimiento caigo en el juicio final. Me distéis de comer, de beber y en tercer lugar, o sea muy primordial, fui extranjero y me acogisteis. Vaya susto. No me sonaba que se le diera tanta importancia.

¿ A cuantos cientos de millones de africanos extranjeros estamos ahora mismo explotando para conseguir vivir así de bien en Europa? ¿Por qué nos caben tan pocos emigrantes? ¿Cómo cambiar nuestro corazón de multinacional?

¿Cuántas conversiones necesitará nuestro ministro de interior para pasar de su catolicismo al evangélico? ¿Cuántos Franciscos hará falta para que Europa no sea arrojada a la pena eterna?

Pablo Osés Azcona. Fuengirola

Famosillos ofensivos

Entre otras desgracias, en España padecemos una epidemia de famosillos por un día que, incapaces de decir nada interesante, intentan destacar por decir burradas, ofender a los demás, o ambas cosas a la vez. En esto último acaba de destacar uno de ellos, de cuyo nombre no quiero acordarme para no hacerle el juego, que acaba de cocearnos al decir que las aceitunas son un alimento más bien para animales, ofendiendo a los muchos millones de sufridos conciudadanos suyos que las consumimos con placer, como buen complemento, sin «alimentarnos» fundamentalmente con ellas. ¡Qué cruz, tener que aguantar a quienes ni saben expresarse con propiedad ni con educación!

José Manuel Llera Lozano. Sevilla