La campaña empieza para cada uno de un modo; para mi con una charla inesperada con una persona que siempre ha votado izquierda, y que, realmente preocupada ante el 26-J, me dice: "vamos a ver, éste PSOE de ahora me parece de tercera división, como mucho; Podemos es Pablo Iglesias, al que veo como un listillo peligroso y oportunista; a Rajoy no le puedo votar porque no representa mis intereses". Ahí se para, y le pido que siga con Rivera: "ese, simplemente, no me dice nada". Luego pregunta mi opinión por el voto en blanco. Le digo que es un voto muy cívico y razonable, pero que en España no hay costumbre, por lo que al final los votantes en blanco son pocos y no emiten señal. "¿Qué tendría que hacer, entonces, para decirles a todos que son un desastre?". Ahora soy yo el que se queda parado. Al final le recomiendo que le de una oportunidad a la campaña, por si ve algo en ella.