El Gobierno de Susana Díaz es o debe ser ejemplo a seguir por Mariano Rajoy. La presidenta andaluza cuenta con la muleta de Ciudadanos y gobierna en minoría, teniendo que pactar hasta el lucero del alba, con un PP andaluz que sigue montaraz, pero sin pasarse y Unidos Podemos (Hundidos Podemos, dicen) que no termina por sacarse las espinas del fracaso por no haber alcanzado las expectativas que tenía. Pero Susana Díaz gobierna, lleva a la Cámara andaluza propuestas con suficiente respaldo y aparte de los lógicos rifirrafes con la oposición salen adelante iniciativas y acciones en beneficio del pueblo. Al margen del Moreno-Georgie Dann y ciertas dosis de bilis que se escupen Susana Díaz y Teresa Rodríguez, que tampoco debe extrañar conociendo la poderosa personalidad de ambas, se sacaron adelante en el Parlamento andaluz varias propuestas, alguna de ellas del PP (profesorado) y de Podemos (Infoca), otras de Ciudadanos y de los socialistas. Dinero habrá para los ayuntamientos para dar trabajo a más de sesenta mil personas y más de 25.000 viviendas en zonas rurales se van a legalizar.

Digo, pues, que Andalucía podría ser modelo a seguir por Rajoy, obligado a buscarse apoyos o abstenciones en sus lógicos socios, Ciudadanos, lo convergentes independistas de Mas y los discretos nacionalistas del PNV. Formaciones todas ellas situadas en la derecha conservadora y que podrían arropar a Rajoy en su deseable acceso al Gobierno. Rajoy, sin embargo, tendrá que pasar la de Caín para conseguirlo, tal cual hizo él pasar a Susana Díaz cuando le negó su apoyo para la investidura. En aquella ocasión fue frecuente escuchar a eméritos peperos que gozaban con hacer tragar quina y cicuta a Susana Díaz. Es lo que le pasará ahora a Rajoy y tendrá que aceptar la medicina que de forma irresponsable recetó a la presidenta de Andalucía. De entrada, Ciudadanos se lo va a poner muy difícil, aunque luego tragará. Los convergentes independistas catalanes se venderán por 42.000 lentejas (euros) al mes y los nacionalistas vascos jugarán a la ruleta pero terminarán en el redil de Rajoy. Éste, sin embargo, lo va a pasar mal, acostumbrado como está a hacer de su capa un sayo; o sea, mandar con absolutísima mayoría, sin que nadie osara toserle. Rajoy tragará carros y carretas hasta reeditar, pero con nocturnidad y alevosía, un nuevo pacto del Mayestic, tal cual firmara Aznar con Puyol. Rajoy ya habla catalán en la intimidad. Del España se rompe, a la España que necesito. Genial. Y a todo esto con los legionarios (as) de Mariano Rajoy lanzados a zamarrear a los socialistas para que se abstengan en la investidura de su jefe. Un poco de decencia y no les vendría mal recordar lo sucedido en Andalucía. De Podemos, ni hablar; está en otra onda.

No puedo evitar recordar lo que el PP de Moreno Bonilla, con él a la cabeza, seguido de su fiel Loles López, formaron con los cursos de formación, calificándolo del mayor escándalo político de España y lanzando misiles de carga doble diciendo que se había malversado nada menos que 3.000 millones de euros. Nada de nada. Farsa política del PP para erosionar a Susana Díaz, como ha calificado el asunto el consejero malagueño Sánchez Maldonado. Entonces, la prensa de derechas y contumaces analistas (sic) en arrearle sopapos dialécticos a la presidenta y lo que ella representa, le soplaban las orejas de contento. No pedirán perdón, n i unos ni otros, no está en sus genes. Y la jueza Mercedes Alaya de rositas mientras tengo en mí la imagen de algún imputado pasándolas canutas. Que Alaya siga haciendo literatura, que es lo suyo, pero no a costa de los demás. O que siga buscando donde hincar el diente para diseñar causas generales contra el Gobierno socialista de Susana Díaz. Está en su papel.

P.D. (1) Celia Villalobos se va con dignidad, sin alzar la voz aunque se reconcoma por dentro viendo como su enemiga del alma, Ana Pastor, le pasa por la derecha, sin posibilidad de ir a rebufo. Villalobos tiene tantas tablas políticas que sabe es hora de retirada a los cuarteles de invierno. Pero volverá a primera fila, animal político donde los haya.

(2) Su sucesor en la alcaldía, don Francisco de la Torre, vive su momentos más delicados, que incluso le han hecho perder los papeles, alzar la voz y congestionarse, todo ello malo para el corazón. Limasa, Metro, Mundial, Tabacalera (joyas y coches antiguos) son algunos de sus permanentes quebraderos de cabeza. Y la portavoz socialista María Gámez que lo sabe consigue sacarlo de sus casillas. Está en su papel

(3) De chantaje ha calificado Susana Díaz la rastrera maniobra del Gobierno en funciones para echar un poco de comida a los catalanes. Todo sea por el plato de lentejas. Jorge Fernández Díaz, Montoro, Guindos y Soraya Sáez de Santamaría, los más fieles amigos de los independentistas. Cosas veredes, amigo Sancho, que harán fablar a las piedras.