Del chantaje a la humillación
Pues no, no me ha sorprendido ver a Pepe Blanco haciendo proselitismo de la abstención, es más, hasta comprendo su entusiasmo, no sea que, hacer lo contrario, lo lleve de camino del banquillo por su responsabilidad in vigilando en el accidente de Angrois, obra que se llevó a cabo bajo su mandato como Ministro de Fomento y es que, todo aquél que se ha plegado al chantaje del PP, lo ha hecho por motivos inconfesables y no por el mantra de la responsabilidad. Lo peor es que ahora, investidura en mano, intentan humillar desde dentro a la bancada socialista del Congreso esgrimiendo la disciplina de voto, algo que seguro, va dirigido contra Pedro Sánchez para que o bien votase no y fuese amonestado perdiendo la posibilidad de presentarse en las primarias, o deje definitivamente el escaño, como así ha sido, cayendo en el ostracismo. Parece que susanistas y felipistas no son conscientes de que la humillación también ha llegado a las bases del partido y a sus votantes y de que la herida va a seguir sangrando.
Francisco Javier España Moscoso. Málaga
Piel fina, modos antidemocráticos
Algunos sucesos dan mucho qué pensar sobre el carácter demócrata de muchos políticos, de viejo y nuevo cuño. Uno fue el golpe de mano en el PSOE auspiciado por una Susana Díaz ávida del liderato nacional aun a costa de lo decidido por sus representantes legítimamente elegidos. Ahora, la gestora provisional y el Comité Federal tienen la representación estatutaria guste o no guste, pero surgen los ‘pedristas’ que desacreditan la nueva decisión.
En el debate de investidura del jueves, Pablo M. Iglesias insultó la legitimidad de los representantes legal y legítimamente elegidos al Congreso porque no ha ganado las elecciones tras su revés en junio (con el 21% de los votos), con un discurso rancio a cuyo lado el de Mariano Rajoy, soso, parecía moderno. Y su piel fina no admitió las puyas que le lanzaron, como el caudillo que se cree. Con esos modos altaneros, flaco favor les va a hacer a las ‘clases populares’ que dice representar, que le darán la espalda.
¿Nueva política? La política es diálogo y cintura, no tacticismo oportunista.
José L. Herrero R. Málaga
