Eduardo Madina y el economista José Carlos Díez coordinan grupos de trabajo para que el PSOE tenga su carta de navegación futura; serán tres meses de intenso trabajo para perfilar si la socialdemocracia tiene vigencia en un mundo asolado por el neoliberalismo en el que lo que importa menos son las personas. La sociedad actual exige nuevas políticas porque las tradicionales recetas socialdemócratas de finales del pasado siglo ya no valen en su totalidad. Hay, sin embargo, coincidencia de los estudiosos en afirmar que ante el nuevo modelo de sociedad corresponde trazar nuevas estrategias aceptando que la lucha contra la desigualdad y la recuperación de las políticas sociales no son la exclusiva receta para conseguir una sociedad más igualitaria. Hay que preguntarse qué significa ser socialista en una España donde el paro, la falta de oportunidades de los jóvenes, la pobreza, la prepotencia y la corrupción sigue anidando en lo más profundo de una sociedad que parece aletargada, sin capacidad de reaccionar contra estas situaciones. No debe faltar en estos análisis y grupos de trabajo el preguntarse y dar respuesta a porqué una parte de los ciudadanos, los que votan a partidos de la derecha o de la derecha extrema, tienen en su ADN exculpar en las urnas a los corruptos, mentirosos y aves de mal agüero que siguen asomándose a los medios informativos con la chulería propia de quien se sabe que puede ejercer su derecho de pernada y salir de rositas.

Si el PSOE, a mi juicio, debe cerrar las tres fracturas de las que escribía en mi anterior artículo (Fractura territorial, generacional e ideológica) importa mucho las actitudes personales de quienes se presentarán a las primarias Patxi López, Susana Díaz, Pedro Sánchez y quizás alguno (a) más); también de sus equipos y estar sobre aviso de cómo se desarrollará la campaña, termómetro intelectual que indicará si se ha superado la etapa avinagrada del insulto, de la descalificación y de los enfrentamientos para pasar al debate sensato y serio, con exposición de ideas y programas. Hay materias tan cercanas a las necesidades de los ciudadanos que enredarse en temas del pasado («no es no», por ejemplo) no harán que hundir aún más a un partido que dice y quiere ser alternativa de Gobierno y capaz de detener las políticas neoliberales del PP.

Hay materia por delante y es de esperar que tanto Madina como José Carlos Díez tracen el camino de lo que verdaderamente importa a la ciudadanía. Veamos. A) Cómo luchar contra el paro y la precariedad en los contratos. B) Cómo terminar con la desigualdad. C) De qué forma se puede hacer sostenible el Estado de Bienestar (sanidad, educación, dependencia, etc.) D) Cómo plantear con visión de futuro el problema territorial de España (cómo cogestionar y fijar las bases para un entendimiento real de los socialistas catalanes y el resto de España). E) Protección de los derechos y libertades de los ciudadanos y F) Cómo entender y defender la Europa que es cada vez menos Europa.

Ya me dirán ustedes si no hay materia suficiente para elevar el debate, situarse en ideas fuerza que innoven, capaces de reinventarse caminos menos trillados que los transitados hasta ahora y con capacidad para diseñar una hoja de ruta creíble y posible desde una izquierda sensata y seria, lo más alejada posible de ciertos aventurismos castrantes. Importa, pues, que el debate que se abre no sea una forma de escupirse a la cara reproches, con juicios sobre quienes fueron o no traidores. El candidato a liderar el PSOE que lo consiga será abrirá una puerta a la esperanza.

P.D. - (1) En Podemos se corta el aire con un cuchillo envuelto el partido en un infierno de conspiradores y de veladas amenazas donde los egos, o sea alcanzar el poder, supera cualquier otra estrategia. Pablo Iglesias permitió que gobernara el PP de Mariano Rajoy y eso se paga.

(2) Primero fue la Blanca Paloma (la Virgen del Rocío versus Fátima Báñez) la encargada de solucionar el paro y ahora Mariano Rajoy hace rogativas para que llueva, única vía, al parecer, para que no suba la luz. Y mientras, directivos de las empresas eléctricas se auto adjudican millonarios bonus. No se preocupen, pronto veremos a Rajoy en procesión para pedir la lluvia bendita. ¡Señor, señor!

(3) Acertada es la propuesta de Miguel Ángel Heredia para que la catedrática de Derecho Constitucional de la UMA, María Luisa Balaguer, sea elegida miembro del Tribunal Constitucional. La doctora Balaguer es un claro ejemplo de superación y sensatez; excelente profesional e histórica luchadora por lo social y las políticas de género. Será un honor para Málaga y los malagueños.