El resto de la política española parece haber enmudecido: llevamos días sin que los soberanistas produzcan noticia, ni hagan siquiera alguna de las muecas que mantienen vivo y coleando el proces; tampoco se ha presentado, ni por táctica se habla siquiera de ella, la moción de censura contra Rajoy (una OPA hostil contra el PSOE en realidad) anunciada por Podemos y que sigue a la espera del mejor momento. ¿Qué es lo que unos y otros aguardan?. Obviamente un cambio en el PSOE que pueda proporcionar un marco más favorable a sus planteamientos respectivos, moviendo todo el tablero. ¿Para bien o para mal? Nunca se sabe, pero la cuestión es que no se altere el ritmo de crecimiento del PIB, que felizmente parece haberse impermeabilizado de la política española, sin que por el momento le afecten sus borrascas. Cada décima de punto de crecimiento son miles de puestos de trabajo.