Las caras de político ante los nombramientos de los nuevos ministros. Algunos comentarios que mejor que no. O esas frasecitas del pasado en las redes que ahora salen y, claro. Decía Groucho que es mejor estar callado y parecer tonto que hablar y demostrarlo definitivamente. Aunque no dejo de pensar, cada día con más fuerza, que si se dicen algunas cosas como las que algunos dicen o son tontos de verdad o toman por tontos a aquellos a quienes se dirigen. En ambos casos la cosa casa. Quiero decir que miden la talla de quien las dice. Con todo, el gran fichaje de Sánchez, el verdadero fichaje estrella, ha sido el del juez Grande Marlasca.

Mareo de mareas

También ha hablado Teresa Rodríguez, la líder ya no sabemos si de Podemos, en Andalucía, y con dos frases en las redes sobre ‘Adelante Andalucía’, el «nuevo espacio andaluz de encuentro» junto a Izquierda Unida, ha puesto de los nervios a los morados de la formación nacional. Y mira que una de las frases es bonita: «Un crisol del cambio en un mes de luz que suena a fuente de mármol y huele a tomillo y jazmín». Hay también un vídeo que a las 13h de ayer tenía 13.100 reproducciones. Se trata de un vídeo de presentación de la plataforma mirando ya a las elecciones andaluzas, si no se adelantan, de marzo del año que viene. El vídeo termina con Teresa Rodríguez, de negro, y Antonio Maíllo, de blanco, coreando Adelante al unísono (a propósito, me causa respeto ver cómo Antonio Maíllo agarra la vida por el hígado y avanza delgado y fuerte hacia adelante, plataforma electoral al margen). Los de verde, blanco y negro en Andalucía parecen caminar separados de morados y rojos en Madrid.

Goteo ministerial

Pablo Iglesias tampoco parece estar muy contento con el nuevo Gobierno, o mejor, con Sánchez. La alegría de «echar» a Rajoy, a quien Iglesias le dedicó afectuosas y elegantes palabras como puente de plata, ha durado hasta que el goteo de nuevos ministros ha escampado en la foto final: 11 ministras y seis ministros. Un goteo de nombres que ha ido cayendo como chispas de fuegos artificiales sobre los hombros de los medios, no se sabe si por marketing político o por ir encontrando a los elegidos, en tan poco tiempo, sobre la marcha. Pero en el arco parlamentario todos, más o menos confesos, han bendecido el resultado. En el PP, excepto el previsible Rafael Hernando, quienes estaban más preocupados por España que por el partido han respirado más tranquilos. En Ciudadanos, algo descolocados por la extrañamente poco afortunada actuación de Rivera en la moción de censura, también.

Carmen y Soraya

El traspaso de carteras dio momentos de sosiego que trasladan normalidad democrática. Para bien sorprendieron las palabras de admiración de Carmen Calvo a su antecesora, una Soraya Sáenz de Santamaría puesta en solfa por una parte del PP, que ya anda enredado en la búsqueda de nuevo líder -al que no habría que llamar más sucesor-. Contrastaron con la fría corrección con que Mª Dolores de Cospedal entregó su cartera de Defensa a Margarita Robles; o con la entrega de la suya de Montoro, algo ido, a la briosa Montero, encantada con la 'a' de ministra que le han rotulado en la cartera.

85 escaños

Como bien vino a decir Ábalos, ya ministro de Fomento, veremos a ver qué gobierna este gobierno y durante cuántos meses le dejan, teniendo en cuenta sus escuetísimos 85 diputados y la ensaladilla de siglas que ponen de menú del día en el Parlamento. Pero hay Gobierno, aunque no era fácil creerlo. Sin ir muy lejos, en 2016 Susana Díaz decía esto: "Siempre he defendido que con 85 escaños no se puede gobernar este país y lo que hay que hacer es una oposición útil". Quienes no viven amargándose la vida unos a otros, tienen motivos para pensar que lo que nos está pasando con todo esto iluminará un camino recto donde antes no se dejaba de dar vueltas.

Cervantes fascista

Es legítimo pensar que Sánchez es presidente del Gobierno sin respaldo. También argumentar aquello de que en una democracia parlamentaria los apoyos políticos representan a los ciudadanos que les votaron. Pero, en este curioso caso, quienes «apoyaron» la moción de Sánchez que le ha llevado a la Presidencia apoyaban la expulsión de Rajoy y, según alumbra este nuevo Gobierno, Sánchez simplemente estaba en medio. Con el valeroso europeísta, catalán y español Josep Borrell como ministro de Exteriores, veremos qué le van a votar a Sánchez los indepes que abuchearon el jueves a los «fascistas» que homenajeaban a Cervantes en la Universidad de Barcelona. Con las cosas tan bonitas que Cervantes escribió de la ciudad condal en la Galatea o, por ejemplo, puso en boca del Ingenioso Hidalgo en el capítulo LXXII de la segunda parte del Quijote: «Barcelona, archivo de la cortesía, albergue de los extranjeros, hospital de los pobres, patria de los valientes, venganza de los ofendidos, y correspondencia grata de firmes amistades, y en sitio y en belleza, única». Pero, mejor yo también me callo ya... Porque hoy es sábado.